Cómo se fabrica un éxito

Sesenta y siete días y más de cuatro millones de espectadores. El 11 de octubre, El orfanato ocupó las pantallas de toda España con 350 copias. Ese día comenzó el éxito cinematográfico del año. Los espectadores fueron los primeros testigos de una historia que se engendró hace casi 30 años. ¿Suerte? ¿Estrategia? ¿Talento?

En 2003 se fijó el presupuesto para el filme: entre 2 y 2,5 millones de euros

El primer boceto del guión lo hizo Sergio Sánchez entre 1997 y 1998

Guillermo del Toro consiguió que el Festival de Cannes proyectara el filme

"Un guión sólido, un director con pulso, oficio y visión, y una actriz que implica y conmueve al público. Detrás, unos productores que actúan en mayor o menor medida de guardaespaldas del proyecto". Estos son los ingredientes que, a juicio de Guillermo del Toro, el cineasta mexicano afincado en Hollywood y padrino de El orfanato, han hecho de esta película, dirigida por el debutante Juan Antonio Bayona, barcelonés de 32 años, y protagonizada por Belén Rueda, el éxito del año en las pantallas de cine de España. Unos ingredientes bien mezclados y bien cocinados, con mimo, a fuego lento, durante muchos años. Con más de 23 millones de euros recaudados en dos meses, desde su estreno el pasado 11 de octubre, este melodrama en la penumbra de fantasmas y miedos ha arrasado en las taquillas. Uno de cada diez españoles ha visto este filme de corte clásico de género de terror, que mañana lunes parte como favorito en las candidaturas de los premios Goya. ¿Suerte? ¿Buenos padrinos? ¿Un cuidado y potente marketing? Todo bien ligado como una buena salsa.

- Amigos invisibles. Watson y Pepe, los amigos invisibles de Simón, el niño de El orfanato, esos que provocan la desazón y el desánimo de la madre existen desde hace años. Desde que Sergio Sánchez (Oviedo, 1973), el guionista del filme, los imaginara durante sus largas convalecencias infantiles en un hospital de Asturias. "Nacen de mis propios temores de la infancia", dice Sánchez. El primer boceto del guión de El orfanato, cuyo primer título fue Huellas, lo escribió entre 1997 y 1998, tras su paso por la escuela de cine de Nueva York con intención de dirigirlo. Lo movió por decenas de productoras sin éxito. Se desilusionó, tiró la toalla y lo guardó en el cajón.

- Diciembre de 2000. Alcudia, Mallorca. En esa fecha se conocen Sergio Sánchez y Juan Antonio Bayona, al que sus amigos llaman Jota, en un festival de cortos. "Descubrí 73.37, un corto que me entusiasmó. Era inquietante, dentro de una atmósfera muy asturiana, ambientado en el presente y en la Guerra Civil", recuerda Bayona. 73.37 lo había dirigido Sánchez. Congenian, se hacen amigos. Y es entonces cuando el guión de El orfanato cae en manos de Bayona. "Fue muy generoso por darme el texto y no querer imponer su criterio sobre el mío".

- Entra Rodar rodar. En una oficina que con el ambiente de un periódico de los años veinte, con madera y grandes ventanales, en pleno barrio de Gracia, en Barcelona, se encuentra la productora independiente Rodar rodar. A su frente la pareja formada por Joaquín Padró y Mar Targarona, que durante años han centrado su trabajo principalmente en proyectos de publicidad. Siempre a la busca de nuevos talentos, crearon una escuela de guiones hace 14 años, por donde apareció Jota, que terminó trabajando de realizador publicitario. Pero el cine era algo que rondaba en la cabeza de todos. Fue entonces cuando Jota llega con el guión de El orfanato. "Jota tiene un gran talento, es creativo, con una cultura audiovisual imponente", asegura Padró. Vieron en El orfanato un tesoro y se embarcaron en su búsqueda, la quinta película de esta pequeña productora. Se fijó entonces un presupuesto para el filme de entre 2 y 2, 5 millones de euros. En 2003 se firma el contrato con Sergio Sánchez, que renuncia a dirigir la película, como guionista y Juan Antonio Bayona como realizador. Sergio firmó 30.000 euros por el guión y 6.000 por el making off. Bayona consiguió algo más del doble que su amigo, pero no el porcentaje sobre taquilla que él solicitó. Con el dinero en la mano, Sánchez pasa dos años en el más absoluto aislamiento en tierras asturianas reescribiendo su gran historia nacida en la infancia que ha terminado por enganchar a más de dos millones de espectadores.

- Belén Rueda, una actriz tocada por el dolor. Sin ninguna recomendación y a través de su representante, Manuel Fernández Vega, el guión de El orfanato llega a manos de Belén Rueda. Se habían manejado algunas otras actrices, pero siempre en todas las listas y en primer lugar aparecía ella. "Era la única actriz en el mundo que lo podía hacer. Ya había hecho Mar adentro. Es una mujer tocada y herida por el dolor en su vida personal [perdió a una hija de corta edad]. Belén tiene una profundidad que no la tiene que actuar. Fue la opción de todos. Jugar con Belén era jugar en liga superior", explica Mar Targarona. Fue en Navidades de 2005, cuando la actriz lee por primera vez el guión enviado por Rodar, rodar. En 48 horas y tras consultar a Alejandro Amenábar, director de Mar adentro, dijo que sí. "Me interesó esta historia que utiliza elementos clásicos pero dotados de un significado terrenal", dice la actriz en la oficina de su representante. Para conocer a Bayona y Sánchez se traslada a Asturias, donde el guionista convalece de un gravísimo accidente de tráfico ocurrido la víspera de Nochebuena. Se queda impactada de su profundidad, de su potencia visual.

- El gran padrino. Bayona conocía desde hace tiempo a Guillermo del Toro, el director del gran éxito del año pasado, El laberinto del fauno. Apadrinó el proyecto y lo llevó directamente al cielo, abriendo puertas en el mundo entero. Fue el que consiguió que el Festival de Cannes lo proyectara, el que ha movido las potentes teclas del mercado internacional, el que lo ha hecho algo más grande. "Alguna vez he empujado para que el esquema de la película respondiera exactamente a lo que Bayona pedía y necesitaba. Creo que la película sería diferente sin mí, pero Bayona es un monstruo creativo donde le pongas. Quisiera pensar que el éxito, que el mérito, es de él", dice Del Toro por correo electrónico.

- Amor a primera vista. El consejero delegado de Tele 5 Cinema, Álvaro Agustín, se enamoró del proyecto. Financieramente fue el espaldarazo definitivo, La maquinaria de marketing de Tele 5 se puso en marcha. El presupuesto creció hasta los 3,8 millones de euros más los 1,5 dedicados a copias y publicidad. "Se combinó el ingenio y el talento junto con el dinero", dice Agustín, orgulloso también de que hasta la tercera semana del estreno, El orfanato no apareció ni en un top manta ni en copias de Internet. La distribuidora Warner introdujo señuelos para impedir copias piratas. "Ahora es líder en descargas de Internet".