_
_
_
_

Un estilo para todos los públicos

Fito remata la gira 'Antes de que cuente Diez' en el Palacio de los Deportes de Madrid

Mucho ha cambiado la carrera de Fito Cabrales desde que visitó por primera vez la capital y no consiguió llenar La Riviera. Un panorama muy distinto fue el que se encontró la noche de ayer en el Palacio de Deportes de Madrid, donde el bilbaíno y su banda remataron la gira de presentación de Antes de que cuente Diez ante 15.000 personas. El espectáculo que ha llevado por toda España se basó en su cancionero más conocido, ese que ha arrasado en la radiofórmula, al que añadió algunos momentos de rock vitalista y cálido. El patilludo cantante y guitarrista solo tiene que sonreír y saludar con su inseparable boina para que quede claro que aquello es una batalla ganada.

"Siempre me preguntan si Fito es tan majo como parece. Yo siempre digo que tanto o más", explicaba hace unos meses su productor y compañero sobre el escenario, Carlos Raya, encargado de aportar el toque añejo de su guitarra. Tras un vídeo de presentación, la banda alterna singles y temas nuevos, como Antes de que cuente diez, con bazas seguras como Soldadito marinero, Por la boca vive el pez, La casa por el tejado o la sorprendente Trozos de cristal. Desde que disolvió su antigua banda, Platero y Tú, Fito se ha ido alejando de sus influencias más urbanas a favor de cadencias más tranquilas, pero se reserva algunas animadas declaraciones de principios para el final de sus actuaciones. Qué necesario es el rock 'n' roll ("qué prescindible el cuero", proclama la letra) animó a que los que venían buscando su lado más potente. El riff de Viene y va, orgullosamente stoniano, ayuda a equilibrar la balanza.

Más información
Fito Páez, terremoto emocional

Las pantallas y vídeos preparados para cada canción subrayan un espectáculo bien medido y efectivo, que intentó llevarse a su terreno a una variopinta audiencia, entre la que se podía ver seguidores de la faceta más comercial del grupo, pero también algún rockero insobornable y hasta familias al completo. "Le vimos hace poco, pero siempre que viene repetimos", explicaba un grupo de adolescentes, mientras apuraban un vaso de litro antes de entrar al recinto. Pero anoche no solo terminaba una gira, también una carrera. Lichis, de La Cabra Mecánica, su telonero de lujo, finiquitó ayer su personal propuesta, a base de rumba, letras llenas de ironía y un punto canalla.

Fito Cabrales, durante el recital de anoche en el Palacio de los Deportes de Madrid.
Fito Cabrales, durante el recital de anoche en el Palacio de los Deportes de Madrid.SAMUEL SÁNCHEZ
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_