Lula da Silva, presidente... y héroe de cine

El 1 de enero de 2010 se cumplirán -o no- las expectativas del público brasileño. Ese día se estrena Lula, el hijo de Brasil, que narra los 35 primeros años de la vida del presidente y ex sindicalista Luiz Inácio Lula da Silva, desde su nacimiento hasta el momento en que muere su madre y es encarcelado por los militares por sus actividades sindicales durante las huelgas de los metalúrgicos de São Paulo en 1980.

Bajo la dirección de Fábio Barreto (cuya película El cuarteto fue candidata al Oscar en 1996), Lula, el hijo de Brasil cuenta con el actor Rui Ricardo Dias como Lula. El guión es de Denise Paraná, una antigua asesora de Lula.

Según los productores, nunca en la historia cinematográfica brasileña una película ha tenido tal difusión. El filme no sólo se estrenará en 400 salas, muchas más de las habituales, sino que también se proyectará en pantallas itinerantes para llegar hasta los rincones más pobres y lejanos. Y estudian transformar la película en una miniserie para la televisión. Además, planean rebajar el precio de las entradas para que nadie, por motivos económicos, deje de ver el filme. Los 10 millones de sindicalistas se van a movilizar en la difusión de la película -cuyo coste ha sido ocho millones de euros-, ya que se centra en la actividad sindical de Lula, antes de fundar el Partido de los Trabajadores (PT) y conquistar la presidencia de la República.

Quienes ya han visto el filme aseguran que es difícil no emocionarse con la epopeya de este hombre que cursó sólo la escuela primaria y después un curso de mecánica, y que salió de su paupérrima región del noreste brasileño en un carro de bueyes con toda su familia, en busca de trabajo hacia el Estado de São Paulo, donde acabó vendiendo helados en la calle.

La oposición califica el lanzamiento como operación de marketing, ya que en 2010 habrá elecciones presidenciales, en las que Lula espera que le suceda su ministra de la Casa Civil, la ex guerrillera Dilma Rousseff.