Inocencia interrumpida
La novelista Mercedes Castro recomienda 'El libro de los niños', en el que A. S. Byatt narra la sociedad utópica de los fabianos en la Inglaterra de finales del siglo XIX hasta la Primera Guerra Mundial
En el ocaso de la era victoriana, una familia vive ajena al acecho de la Primera Guerra Mundial en una mansión campestre. Se trata de la escritora de literatura infantil Olive Wellwood, su marido y sus hijos. Juntos han creado un ambiente de fantasía y culto al arte, la política y la tertulia que les hace vivir todavía más aislados de la realidad. Éste es el punto de partida de El libro de los niños (Lumen), de Antonia Susan Byatt (Sheffield, Inglaterra, 1936).
La escritora gallega Mercedes Castro (Ferrol, A Coruña, 1972) confiesa que A.S. Byatt ya le fascinó con Posesión: "Desde entonces soy una fanática de su prosa". Ésta, su novela más conocida, fue premio Booker (uno de los más prestigiosos del mundo de literatura anglosajona) en 1990 y éxito cinematográfico protagonizado por Gwyneth Paltrow en 2002. El libro de los niños fue también finalista del premio Booker en 2009.
A.S. Byatt tardó siete años en completar las 958 páginas que tiene El libro de los niños. En la novela, la familia Wellwood vive tranquilamente en su casa de campo hasta que un día, el hijo mayor de la protagonista encuentra a un niño en una sala del museo Victoria and Albert de Londres. El pequeño, de origen humilde, es finalmente acogido por los Wellwood.
Se trata de un libro coral, con multitud de personajes, donde los adultos viven en aparente igualdad con los niños. A.S. Byatt logra un retrato muy fiel de la época victoriana. Además, los Wellwood pertenecen a la Sociedad Fabiana, así como los padres de A.S. Byatt, por lo que la novela tiene algo de autobiográfica. Los fabianos nacieron a raíz de un grupo de simpatizantes socialistas en la Gran Bretaña de 1883. Su objetivo era la reforma social, la apuesta por la educación y la sanidad gratuitas y la igualdad en todos los aspectos. Esta forma de pensar influencia sobremanera a los hijos de Wellwood. Los protagonistas se mezclan con personajes que van y vienen y, mientras corre el tiempo, el lector verá cómo esos niños se hacen mayores y tienen que enfrentarse a los rigores de la Primera Guerra Mundial. Una contienda en la que más de nueve millones de personas, incluidos niños, perdieron la vida.
La autora, aunque predecible, cultiva una novela inglesa relajada, descriptiva y hecha para paladear cada renglón. "Tiene una profundidad única sin ser pedante, sus obras son reales, entretenidas y muy bien escritas", asegura Mercedes Castro (Y punto, Mantis). Por último, da un consejo sobre la lectura de El libro de los niños: "Ya que esta novela tiene casi mil páginas, creo que el mejor momento para encarar su lectura y disfrutarla como merece es un largo, largo verano". Aprovechen lo que queda.
El libro de los niños, de A. S. Byatt (Lumen). Traducción de Miguel Temprano García.
Otros libros de A.S. Byatt:
Posesión (Anagrama)
Ángeles e insectos (Anagrama)
El libro negro de los cuentos (Alfaguara)
La mujer que silba (Emecé)
Mercedes Castro: "Me fascina Emily Dickinson"
Mercedes Castro (Ferrol, A Coruña, 1972) es licenciada en Derecho y trabajó como editora antes de publicar su primera novela, Y punto, en 2008. Ha participado en numerosos festivales de novela negra y policiaca. Estos son otros libros que nos recomienda leer este verano:
Los gozos y las sombras, de Torrente Ballester (Alfaguara)
"Vuelvo a releer esta trilogía todos los veranos, para aprender. Lo tiene todo: pasión, verismo, trama cautivadora, personajes potentes y únicos. Uno de nuestros mejores narradores en castellano nunca suficientemente reivindicado".
Matar un ruiseñor, de Harper Lee (Zeta)
"Otra novela que releo con frecuencia, que conjuga como ninguna la crudeza de un entorno hostil con la aparente felicidad de un verano infantil. Es una obra maestra, te hace reír, llorar y entender muchas cosas y cómo escribirlas sin caer en sentimentalismos, con el punto justo de ternura y denuncia".
El poder del perro, de Don Winslow (Mondadori)
"Novela negra dura y brutal, sobrecogedora pero con esa extraña fuerza que te hace seguir leyéndola, completamente enganchada, hasta el final. Puro entretenimiento sin descuidar la conciencia y la buena prosa".
Cartas, de Emily Dickinson (Lumen)
"Me fascina esta poeta en especial. Sus poemas son muchas veces enigmas y sus cartas ayudan a descrifrarlos y a comprenderla mucho mejor, aunque nunca llegaremos a hacerlo realmente y, precisamente por eso, nos sigue fascinando".
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