Videoanálisis | ¿Por qué hay tan pocas vacunas de la viruela del mono?
El periodista de EL PAÍS especializado en temas sanitarios y de salud, Pablo Linde, explica por qué hay tan pocas dosis para combatir esta infección
La expansión de la viruela del mono ha pillado al mundo tratando de salir de la pandemia de covid, pero no se puede decir que haya sido algo completamente inesperado. Desde hace años se venían produciendo brotes en África, con casos esporádicos fuera que en cualquier momento podían multiplicarse. Sin embargo, ahora que ha llegado ese momento, hay una tremenda escasez de vacunas. Se están racionando en todo el mundo y ni siquiera se está siguiendo por el momento la pauta completa, que consta de dos dosis. Para llegar al mayor número de personas posibles, se está poniendo de momento solo una inyección, que ofrece una protección de en torno al 30%, frente al 80% de la pauta completa. En el vídeo que acompaña a esta noticia, el periodista de EL PAÍS especializado en temas sanitarios y de salud, Pablo Linde, explica por qué hay tan pocas dosis para esta enfermedad y qué alternativas se están llevando a cabo para sortear la escasez.
Las vacunas que se están usando contra la viruela del mono no son específicas de esta enfermedad, sino que están diseñadas para la viruela tradicional. Aunque parece que arrojan una alta efectividad, es necesario estudiarlo mejor. En España se está inoculando la de última generación de la farmacéutica Bavarian Nordic, que requiere dos dosis y hace efecto completo dos semanas después del segundo pinchazo.
Más allá de la vacuna, que no está a disposición de todo el mundo, la OMS recomienda estar muy atento a los síntomas descritos antes para detectar la enfermedad cuanto antes y pide a las personas que muestren signos de la enfermedad que se aíslen para no propagar el virus. También ha aconsejado a los hombres que tienen sexo con hombres que reduzcan el número de sus parejas sexuales. Esto ha indignado al colectivo LGTBI en España, que se siente señalado. La Coordinadora estatal de VIH y sida (Cesida) también cree que se trata de un mensaje equivocado.
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