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Columna
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’The Undoing’, diseñada para triunfar

Guionista, productor, estrellas y secundario de lujo no son suficientes para que el resultado no supere el aprobado raspado

Hugh Grant y Nicole Kidman, en 'The Undoing'.
Ángel S. Harguindey

Decía Rafael Azcona que si en el cine se pudiera prever el éxito en taquilla, el cine sería del Banco de Santander. Y no le faltaba razón, sobre todo en lo referente a la imprevisibilidad de los resultados comerciales de cualquier producto audiovisual.

Imaginemos a un guionista y productor de series curtido en mil batallas: David E. Kelly, por ejemplo, en el oficio desde 1986 y que cuenta en su haber éxitos populares como Ally McBeal o Boston Legal y de crítica, como Big Little Lies. Imaginemos también que quiere escribir y producir una nueva serie a rodar en Nueva York, The Undoing (HBO) calificada de suspense psicológico de misterio.

Una vez pensada la historia a contar hay que elegir el reparto. Y Kelly apunta alto: Nicole Kidman y Hugh Grant como protagonistas, y un secundario de lujo: Donald Sutherland. La trama busca el interés del espectador: un matrimonio adinerado, ella psicóloga, él oncólogo. Un hijo que asiste a un colegio elitista, al que también asiste como becario el hijo de una atractiva mujer, Elena, que aparecerá brutalmente asesinada. La investigación irá enfocando a diversos posibles autores del crimen hasta la resolución final. Nada nuevo salvo que se muestra también con rotundidad la desigualdad social: los pisos del matrimonio adinerado y, sobre todo, el del multimillonario padre de la esposa, Donald Sutherland, nada tienen que ver con el de la asesinada, de origen hispano como su marido. En ocasiones, las localizaciones de interiores elegidas bastan para comprender quiénes son high class y quiénes no.

Pues bien, guionista, productor, estrellas y secundario de lujo no son suficientes para que el resultado no supere el aprobado raspado. Lo dijo Azcona: no se puede prever el éxito.

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