"Ser 'pirata' es mucho más que oponerse al canon"
El embrionario Partido Pirata español apuesta por modificar la Ley de Propiedad Intelectual, pero también por una democracia participativa
El reciente éxito del Partido Pirata sueco, que consiguió representación en la Eurocámara, y, en menor medida, del alemán, ha puesto en boca de todos a una formación que está presente ya en 27 países. También en España. ¿Quiénes son los piratas españoles? Por ahora, un partido con 133 afiliados y todavía sin sede que no pudo presentarse a las últimas elecciones por falta de firmas. Pero también un grupo de personas convencidas de que es sólo "cuestión de tiempo" emular aquí los resultados del país nórdico y elevar al debate parlamentario sus propuestas de eliminar el canon digital y potenciar el software libre. "Queremos llevar la revolución de Internet a la vida democrática", resume su presidente, Carlos Ayala, para quien ser pirata "es mucho más que estar a favor del libre intercambio de archivos".
Ayala, un ingeniero técnico de Comunicaciones de 29 años y con un trabajo a tiempo parcial, preside la Junta Directiva Nacional del Partido Pirata español. Aunque la formación existe desde enero de 2007, todavía está lejos de alcanzar los resultados que han sorprendido al mundo. "Es cierto que no tenemos muchos afiliados", comenta el presidente, "pero más de 3.000 personas se han registrado ya en la web, y los simpatizantes son muchos más". Además, recuerda que el Partido Pirata alemán "también tenía pocos afiliados, unos 900, antes de conseguir más de 200.000 votos en las últimas elecciones. La diferencia está", continúa, "en que ellos tenían una buena estructura de base, con gente en todo el territorio nacional, y eso todavía tenemos que conseguirlo nosotros".
Por eso, su principal objetivo ahora es dar visibilidad a su proyecto en todo el país. "Tenemos ya agrupaciones locales en Madrid, Cataluña y Aragón", dice el responsable de Relaciones Públicas del partido, Ignacio Blanco, "mientras que se están formando en otras ocho comunidades". Estos grupos serán los encargados de sacar a las calles un debate que ya se está haciendo en Internet: la mayoría de las reuniones se realizan de forma telemática a través de una especie de chat, mientras los distintos grupos de trabajo estudian cuestiones más concretas en un foro al que se accede desde su página web.
El 'ideario' pirata
¿En qué consiste el ideario pirata? "Los piratas no somos sólo quienes queremos quitar el canon", responde Ayala, "defendemos las libertades públicas, los Derechos Humanos, la transparencia, la modificación de las patentes informáticas, y apostamos por la Sociedad de la Información". Una apuesta clara por Internet: el discurso suena similar al de otros partidos homónimos, pero con un mayor hincapié en la participación ciudadana. "Los piratas suecos negociaron con otro partido, Los Verdes, y dijeron que seguirían su ideario en los aspectos que quedaban fuera de su programa", continúa el presidente, "nosotros tenemos prohibidos los pactos de legislatura y los gobiernos de coalición en nuestros estatutos".
Su propuesta para tomar las decisiones que queden fuera de este ideario es la Iniciativa Legislativa Ciudadana, una herramienta muy parecida a la Iniciativa Legislativa Popular: serán los propios afiliados quienes propongan las medidas que les interesen; luego, habrá un debate y una votación, que debe tener un amplio consenso. "Si se cumplen los requisitos, el partido va a tomar esa iniciativa y la va a defender allá donde tenga representación", explica el presidente, "lo que no tiene sentido es que, como ahora, haya una propuesta respaldada por 500.000 firmas y el Congreso pueda rechazarla sin siquiera debatirla". En su opinión, esto supondría "llevar la revolución que ha supuesto Internet a la vida democrática". "La verdadera pregunta es si la sociedad madura para la democracia. Si es que sí, no hay que tenerle miedo a lo que diga la gente", señala.
"Piratear no es robar"
El principal caballo de batalla de la formación es la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual y la eliminación del canon digital, una medida "opuesta a la voluntad popular" y contra la que se reunieron tres millones de firmas. "En contra de lo que dicen algunos, piratear no es robar, esa mentira tiene la pata muy corta", explica Ayala. "Según el Código Penal, compartir archivos por Internet es perfectamente legal" mientras no exista una finalidad comercial, "así que quien llama ladrones a quien se baja música por Internet está mintiendo".
Según el ingeniero, "lo que hay que pensar es si el modelo de negocio de la industria del entretenimiento es el correcto", pero "echarle la culpa al ciudadano no es justo", sino que "son las empresas las que tienen que adaptarse a las nuevas necesidades de la sociedad". Y, por supuesto, rechaza que se pueda cortar el suministro de Internet a quien comparta archivos, tal y como se ha propuesto en otros países europeos. Para defender estas ideas, los piratas españoles intentarán presentar candidaturas en las elecciones de 2011. "La pregunta es cuánto tardaremos en lograr los resultados de Suecia, pero antes o después, eso sucederá", dice Ayala.
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