Buscadores, el negocio de responder a tus preguntas
Un congreso reúne en Madrid a 400 expertos para debatir sobre el servicio online más utilizado, sus fuentes de ingresos, y la competencia en un mercado que sólo en EE UU mueve más de 3.000 millones de euros al trimestre
Todos buscamos algo en Internet. Una foto, un empleo, un vuelo barato, una pareja, la web de ese amigo con el que perdimos el contacto, una fotografía, una canción. Datos e información de todo tipo que, de no existir los buscadores, se perderían en el universo en crecimiento que es Internet. Se trata de una herramienta importante para los internautas -que han hecho de este servicio el más utilizado de la Red, según datos de AIMC- y para las empresas, conocedoras de que estar en los primeros puestos en los resultados puede ser sinónimo de éxito económico. No aparecer es casi como no existir. ¿Qué hacer en estos casos? Sobre ello, el funcionamiento y evolución de futuro de los buscadores se hablará desde hoy y hasta el viernes en el Congreso OJObuscador, que reúne en Madrid a más de 400 expertos en la materia.
La segunda edición de este evento -la primera se celebró el año pasado- se ha propuesto “reunir a los mayores expertos en buscadores en Madrid”, según explica Tomy Lorsch, director general de OJOinternet y editor de OJObuscador. Especialistas en optimización de páginas para que sean atractivas a ojos de los buscadores (conocidos también por las siglas SEO), que pondrán en común en la capital de España las últimas técnicas para conseguir aparecer en la primera página de los resultados, las últimas tendencias en usabilidad o los efectos de creciente poder publicitario de estas compañías.
Los buscadores “tienen una influencia real en las decisiones de compra y, cada vez más, en muchas otras elecciones de nuestra vida diaria y quien no aparece en posición destacada está definitivamente en inferioridad de condiciones de poder competir comercialmente”, según Javier Casares, director del Congreso.
Expuestos a los cambios
Los criterios que los buscadores utilizan para determinar si una web resuelve la pregunta concreta que plantea un internauta es un secreto industrial que Google, Yahoo!, Microsoft o Ask, líderes del mercado, guardan con celo. Eso no significa que no se sepa nada sobre cómo funciona un buscador, pero complica más aún la tarea de los SEO, quienes se dedican a establecer estrategias para posicionar una página en lo más alto de los resultados, cuya tarea se ve dificultada aún más por los cambios que los buscadores introducen de vez en cuando en su funcionamiento.
“Normalmente las modificaciones se detectan fácilmente, pero todo depende de tu dependencia de los términos de búsqueda”, señala Lorsch. “Si tu web se posiciona bien con muchos términos distintos, los cambios te afectarán poco, pero si gran parte de tu tráfico depende de las búsquedas que se hagan por una sola palabra, cualquier cambio que haga Google puede convertirse en una catástrofe”.
Revolución publicitaria
La competencia por ocupar el primer puesto entre los resultados es feroz, ya que pocos usuarios revisan los resultados más allá de la primera página. Esto hace que muchas empresas compitan por aparecer en ella no solo con técnicas de posicionamiento, sino pujando en subastas en las que lo que se vende es el derecho a poner un pequeño anuncio cuando se busca por una o varias palabras. Algunas compañías llegan a pagar por aparecer al lado del listado de resultados cuando el usuario introduce en la caja de búsqueda el nombre de la competencia.
La publicidad ha dado así poder económico a los buscadores y ha cambiado estrategias promocionales de las empresas. “Supone un gran cambio porque además permite medir la repercusión que se logra tras la inversión publicitaria” recuerda el director general de OJOinternet.
Los analistas señalan que Google controla el 25% de todos los ingresos que genera la publicidad en Internet, que en el tercer trimestre de 2006 movió en EE UU un negocio de 3.500 millones de euros, según datos del Internet Advertising Bureau y PwC. Ingresos que no sólo provienen de los anuncios que se insertan en los resultados de las búsquedas, sino también de los sistema publicitarios creados por los buscadores para que cualquiera que tenga una página pueda sacarle partido poniendo unos anuncios. “Muchos proyectos pequeños, esos que suelen llamarse ‘de garaje’, están saliendo adelante gracias a la publicidad. Pero hay que tener cuidado, es muy peligroso depender casi exclusivamente de los ingresos que obtienen por esta vía”, advierte Lorsch.
El editor de OJOBuscador recuerda además que el usuario, destinatario de las promociones, no logra distinguir en muchos casos la publicidad de los resultados reales del buscador. “La diferenciación de la publicidad, los colores que se usan, los tipos de letra, está todo muy estudiado para maximizar los beneficios. Hace un año, en EE UU sólo el 18% de los usuarios era consciente de la presencia de publicidad”, señala.
”Nada dura para siempre
El dominio que Google ha logrado en el mercado de las búsquedas y la publicidad asociada es impresionante, pero sus competidores no se rinden, y siguen trabajando para sucederle en la cumbre. Ask, Yahoo!, Microsoft o Technorati son algunos de ellos y presentarán su trabajo en el congreso de OJOBuscador. ¿Lograrán innovar lo suficiente para superar al líder? Lorsch cree que alguien acabará por hacerlo, “nada dura para siempre, en Internet estamos acostumbrados a ver un gran cambio cada cuatro o cinco años”.
En su opinión “cuando intentamos satisfacer una necesidad de información concreta, los resultados de los principales buscadores son bastante similares en términos de relevancia, lo que no quiere decir que sean perfectos”. Y no todo es mejorar la calidad de los resultados, los buscadores siguen trabajando para mejorar el interfaz de usuario, la forma en que le preguntamos al buscador por los contenidos que nos interesan. “Para mi gusto la apuesta más arriesgada en estos momentos es la de Ask, que presenta los resultados de varios tipos de resultados en varias columnas”.
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