El entorno de Mbappé tiene la certeza de que el futbolista está siendo investigado por una agresión sexual, según la prensa francesa

Kylian Mbappé, delantero del Real Madrid y capitán de la selección francesa de fútbol, se encuentra en el ojo del huracán debido a su posible relación con una denuncia por agresión sexual. Esta, según los medios suecos, se habría producido durante el viaje que el jugador realizó a Estocolmo cuando supuestamente se recuperaba de la lesión en el bíceps femoral que le impidió disputar los partidos con su selección. Una mujer presentó una denuncia ante la policía y fue sometida a controles médicos en un hospital. El entorno del futbolista ha confirmado este miércoles por la mañana, según la cadena de televisión BFMTV, que se le ha notificado que Mbappé está siendo investigado. La abogada del jugador asegura que este no tiene que “reprocharse absolutamente nada”.

Las informaciones publicadas por dos periódicos suecos implican a Mbappé en el supuesto caso de agresión sexual. Por el momento, hay dos medios que confirman que figura como “sospechoso razonable” en la investigación de la Fiscalía. Una situación que se produce en un país pionero en aprobar una legislación sobre violencia sexual centrada en el consentimiento.

El martes 15 de octubre, la Fiscalía de Estocolmo confirmó, en un comunicado, que se había presentado una denuncia por violación ante la policía, en relación con “un incidente que ocurrió el 10 de octubre en un hotel del centro de Estocolmo”, sin mencionar nombres. Sin embargo, según los dos periódicos que seguían la información, Kylian Mbappé estaría involucrado. Según el diario Expressen, el futbolista estaría bajo “sospecha razonable”, el nivel más bajo de implicación penal previsto por la ley sueca, algo que publicó este martes también la televisión pública sueca sin citar fuentes. “Esto significa que existen circunstancias concretas que sugieren fuertemente que la persona ha cometido el acto al que se refieren las sospechas”, explica la web de la policía sueca.

El delantero aterrizó en un jet privado en el aeropuerto de Estocolmo-Bromma el miércoles 9 de octubre. Tenía permiso de su club y de su selección, ya que no había sido convocado por Francia para las eliminatorias de la Nations League por una lesión en el bíceps femoral. Se hospedó en el Bank Hotel, un hotel de lujo donde acuden los jefes de Estado durante sus visitas a Suecia. Mbappé, con el rostro parcialmente cubierto por una mascarilla quirúrgica negra, fue fotografiado el jueves 10 de octubre a la salida del restaurante Chez Jolie, local especializado en comida francesa, seguido de tres personas cercanas que le acompañan siempre: su guardaespaldas, su asistente personal y su excompañero del Paris Saint-Germain Nordi Mukiele.

El diario Aftonbladet relata que el grupo pasó la noche en el V, un club exclusivo en el barrio de Stureplan, en el centro de Estocolmo, donde el futbolista y su séquito cerraron parte del local para ellos. El grupo fue trasladado a una sala llamada Ping-pong, porque hay un espacio para practicar tenis de mesa, que el propio jugador disfrutó durante un rato. Según el periódico, “no había lista de invitados para el evento”, pero los jugadores y el personal del club invitaron a algunos asistentes, en su mayoría mujeres. En total, había unas 30 personas y estaban prohibidos los teléfonos móviles, que debían dejarse a la entrada del club en un sobre cerrado. Kylian Mbappé volvió a coger un avión el viernes 11 de octubre con destino a Córcega.

Aftonbladet publicó un primer artículo la mañana del lunes 14 de octubre revelando que la policía científica sueca había acudido al Bank Hotel esa misma mañana para analizar el escenario. En el artículo solo se decía que estaba relacionada con una violación cometida “en el centro de Estocolmo” el jueves 10 de octubre. “La policía recibió la denuncia el sábado después de que la mujer recibiera atención médica”, explicó el diario, al tiempo que vinculaba la investigación con la presencia de Kylian Mbappé en la capital sueca, sin implicarlo directamente.

El lunes por la noche, el diario Expressen aumentó la presión y especificó que la denuncia por violación y agresión sexual estaba dirigida a Kylian Mbappé. La información fue retomada el martes por la mañana por el canal TV4, que aseguró que “la demandante” acudió “a un servicio de atención a víctimas de violencia sexual en el hospital” y “señaló a la estrella del fútbol francés como el sospechoso”. Según Expressen, además, la policía confiscó la ropa de la denunciante. Y la noticia incendió Francia.

El entorno de Mbappé y su abogada, Marie-Alix Canu-Bernard, que acudió a varios platós de la televisión francesa este miércoles por la mañana, continúan señalando que el jugador “no tiene nada que reprocharse”. Su letrada insistió en el hecho de que no fuera posible que esa agresión hubiera sucedido debido al “cordón sanitario” que acompaña día y noche al jugador. “Vive en una especie de burbuja. Está en un contexto en el que no se le permite correr riesgos. Está muy expuesto, su círculo cercano lo sabe y él lo sabe. Como puedes imaginar, todo está preparado para que no se produzca este tipo de situación”, explicó en la cadena francesa BFTV. Además, la abogada se congratuló de que los supuestos hechos se produjeran en un hotel. “Pues mejor. Como no pasó nada, y en la medida en que hay 10.000 cámaras en un hotel, es mejor. Como hemos visto en otras historias recientes de deportistas en el extranjero, gracias a las cámaras y a los pasillos de los hoteles, podemos saber exactamente lo que pasó o lo que no pasó”.

Los periódicos y las televisiones franceses cubren desde hace dos días de forma ininterrumpida el asunto de Mbappé. La tormenta desatada por su supuesta falta de compromiso con la selección se ha unido con la demanda millonaria que le enfrenta al PSG —el jugador reclama al club parisino 55 millones de euros— y que el martes escribía un nuevo capítulo. De hecho, cuando se publicaron las primeras informaciones sobre su supuesta implicación en un caso de violación en Suecia, Mbappé acusó en sus redes sociales a su viejo equipo de estar detrás: “Fake News!!! Esto es cada vez más previsible, en la víspera de la audiencia, como por casualidad”, escribía en X. El PSG contestó a la publicación mostrando “vergüenza” por las palabras de su exestrella y apelando a la “clase” y la “dignidad” para no entrar al trapo.

La noticia ha tenido también un fuerte impacto en el equipo de fútbol nacional. “No es algo bueno para la selección francesa”, reaccionó el seleccionador Didier Deschamps tras la victoria de Francia contra Bélgica el lunes por la noche.