_
_
_
_

El aumento de casos de sarampión en España ya ha provocado 50 hospitalizaciones este año

Cataluña recomienda la vacunación de las personas nacidas entre 1966 y 1980 que desconozcan si fueron inmunizados de niños y no hayan pasado la enfermedad

Sarampión en España: aumento de casos
Un niño es vacunado con la triple vírica en un centro sanitario de Lyon (Francia).BSIP (Universal Images Group / Getty)
Oriol Güell

Medio centenar de personas han sido hospitalizadas en lo que va de año en España por complicaciones derivadas del sarampión, una infección causada por un virus altamente contagioso y potencialmente mortal pero que es fácilmente prevenible mediante la vacuna triple vírica, que también protege frente a la rubeola y las paperas.

Así lo revelan los datos disponibles del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, que no recogen ningún fallecimiento. La enfermedad, que prácticamente desapareció en el país durante la pandemia, volvió a hacer acto de presencia en algunas comunidades a finales de febrero debido a casos importados de otros países. Desde entonces, ha mantenido una tendencia al alza que se ha acelerado desde finales de mayo: en las tres últimas semanas se han notificado más casos que en los primeros cinco meses de 2024. La situación en el resto de Europa es más complicada, con casi 11.000 contagios y 16 muertes en el último año.

En total, hasta el pasado 16 de junio, han sido confirmados en España un total de 123 casos en 13 comunidades autónomas, según el último Boletín Epidemiológico Semanal publicado por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), aunque esta cifra es en realidad superior debido a los retrasos de notificación. Solo Asturias, Cantabria, Navarra y La Rioja, además de Ceuta y Melilla, no han confirmado ningún caso. De los afectados, 24 son casos importados, 44 están relacionados con alguno de los anteriores y los 48 restantes están aún bajo investigación o no se ha podido identificar la fuente de contagio.

Un informe de riesgo publicado esta semana por el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad destaca que el 40,4% de los diagnosticados —43 de los 106 casos confirmados en la fecha de cierre del documento— han requerido ser hospitalizados, aunque el incremento de notificaciones de los últimos días hace que esta cifra haya crecido con seguridad hasta cerca del medio centenar.

Tres de cada cuatro enfermos no estaba vacunado, dato revelador si se tiene en cuenta que menos del 5% de la población no está inmunizada. Otro 10% lo estaba de forma incompleta y solo había recibido una dosis de la vacuna, mientras el 18% había recibido la pauta completa de dos dosis. Según los datos facilitados por algunas de las comunidades más afectadas —Castilla-La Mancha, Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana—, muchos casos sufridos por personas vacunadas son formas del llamado “sarampión modificado”, una manifestación benigna de la infección.

Según el CCAES, las coberturas vacunales de la primera dosis (que se administra a los 12 meses) superan en España el 97%, según datos de 2022, mientras se quedan en el 93,9% en la segunda (a los tres o cuatro años), algo por debajo del 95% recomendado para cortar la circulación del virus entre la población. De los 21 brotes registrados este año en el país, nueve ya están cerrados. De ellos, el 30% es de apenas dos casos, el 65% tiene entre tres y diez afectados y solo uno alcanza los 14.

El incremento de casos ha llevado a las comunidades a volcar los esfuerzos de los servicios de salud pública en el rastreo de contactos y reforzar las medidas para promover la vacunación entre los no vacunadas. La que ha ido más lejos ha sido Cataluña, que ha lanzado “una campaña proactiva vía mensajes SMS” a todas las familias con niños de 4 a 10 años cuya historia clínica no recoja que están correctamente vacunados. Además, según un informe de la Generalitat, el sistema sanitario ha incluido “una alerta que se activa cuando una persona nacida entre 1966 y 1980 que no conste que está correctamente inmunizada acude a la consulta por cualquier motivo con el objetivo de llevar a cabo la vacunación oportunista”.

Los años elegidos no son casuales, ya que coinciden con las personas que pasaron su infancia coincidiendo con la llegada a España de la vacuna, que se fue extendiendo de forma gradual, lo que provocó un progresivo descenso de la circulación del virus. Esto hizo que, a diferencia de los nacidos antes de 1966, muchos menores no pasaran entonces la enfermedad de forma natural pero tampoco llegaran a recibir las dos dosis de la vacuna (como sí hicieron los nacidos a partir de 1980), por lo que son susceptibles de contraer la infección.

Gregorio Montes Salas, secretario general de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria (SEMPSPGS) y profesor de la especialidad en la Universidad de Extremadura, considera que “la revisión del estado inmunitario” de la población es la mejor forma de identificar y vacunar a los grupos no inmunizados. “Las coberturas en España son buenas y los brotes a partir de casos importados son pequeños gracias a la protección de las vacunas. Pero hay bolsas de población sin inmunizar a las que conviene hacer llegar las recomendaciones de inmunización”, afirma.

Diego García Martínez de Artola, portavoz de Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) y microbiólogo en el Hospital Nuestra Señora de la Candelaria (Tenerife) insiste en la necesidad de proteger a los más vulnerables. “Hay personas inmunodeprimidas susceptibles de contraer la enfermedad y desarrollar formas graves. Otro grupo son los lactantes, que a partir de los seis meses pierden la protección que les da la madre en la gestación y no pueden ser vacunados hasta cumplir el año. Es una infección que puede ser mortal en tres casos de cada mil infecciones”, sostiene.

Castilla-La Mancha, con 33 casos, es según los datos del ISCIII, la comunidad más afectada. “Se está produciendo transmisión del virus entre grupos de población no vacunada procedentes de otros países, principalmente Rumanía [el más afectado de Europa por el actual brote], que trabaja en el sector agrícola y se desplaza de unas comunidades a otras” siguiendo el calendario de las cosechas, explica un portavoz.

Cataluña, con 19 contagiados según el ISCIII, es la segunda con mayor impacto. Un informe publicado el pasado 29 de mayo informa de que la mitad de los 16 casos confirmados registrados hasta entonces tuvieron que ser hospitalizados. Tres sufrieron complicaciones graves: dos por neumonía y uno por “sobreinfección respiratoria”.

La Comunidad de Madrid, con 15 casos según la Consejería de Sanidad (14 según el ISCIII), es otra de las más afectadas. El mayor brote se ha registrado en una familia originaria de México, con siete casos (ninguno de los cuales estaba vacunado), de los que “seis han estado ingresados en hospitales privados de la región”, según fuentes de la Comunidad. Tampoco estaban vacunados los otros dos hospitalizados, un hombre de 41 años que desarrolló neumonía y tuvo que ser atendido en la UCI, y otro que sufrió una “reagudización asmática”.

La Comunidad Valenciana ha sufrido una veintena de casos (14 según el ISCIII), de los que seis han tenido que ser hospitalizados, según un portavoz de la Consejería de Sanidad.

La valoración del Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC) es que el actual auge de casos en el continente no se ha frenado todavía. “Se espera que sigan aumentando en los próximos meses debido a la cobertura de vacunación subóptima en varios países”, afirmó el organismo en su último informe de riesgos, del pasado viernes. Tras Rumanía, que ha sufrido cerca de 9.000 casos, los países con más casos desde enero son Austria (446), Italia (399), Alemania (333) y Francia (165).

Josefa Masa Calles, del Centro Nacional de Epidemiología del ISCIII, considera que mientras el virus mantenga esta elevada circulación en Europa “será inevitable” que sigan llegando a España casos importados que, en algunos casos, pueden dar origen a “pequeños brotes”. “Las comunidades están actuando con celeridad y logrando cortar las cadenas de transmisión, algo que se ve favorecido por las coberturas vacunales. En esta situación lo más importante es promover la vacunación entre los grupos no inmunizados”, destaca.

Según el informe del CCAES, en España “el riesgo en la población general es bajo” debido a que en su gran mayoría está vacunada, pero este entre “las personas susceptibles [no vacunadas] expuestas al virus del sarampión será alto y puede ocasionar enfermedad grave”.

Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.
Tu comentario se publicará con nombre y apellido
Normas
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_