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El cantante Pi de la Serra se declara víctima de acoso inmobiliario

Lleva más de 20 años viviendo en su piso de la plaza Sant Jaume de Barcelona

El cantautor catalán Quico Pi de la Serra ha denunciado ser víctima de un caso de acoso inmobiliario por el que podría tener que abandonar su casa de toda la vida, en la Plaza de Sant Jaume de Barcelona, si la Audiencia de Barcelona no revoca una sentencia que le obliga a irse del piso.

El histórico representante de la Nova Cançó ha revelado que está pendiente de que el próximo 4

de marzo la Audiencia de Barcelona se pronuncie sobre el recurso que ha presentado a una sentencia de hace un año que le obliga a abandonar el piso del número 2 de la Plaza de Sant Jaume, en el que lleva más de veinte años como inquilino.

"Mi vida está en este piso, no puedo afrontar que me echen, no sé qué haría", ha lamentado Pi de la Serra, que ha decidido hacer público que se siente víctima de un caso de acoso inmobiliario en solidaridad con el resto de afectados por esta práctica de presión inmobiliaria.

Las propietarias vendieron el bloque a una inmobiliaria

Visiblemente aturdido, el cantautor catalán ha explicado que no tuvo ningún problema con el piso, de unos 200 metros cuadrados y situado en un bloque antiguo, en un céntrico emplazamiento, hasta que sus ancianas propietarias lo vendieron a una inmobiliaria.

Desde entonces, todo han sido avatares, según Pi de la Serra, que ha lamentado que los nuevos propietarios tienen el afán de aprovechar el espacio de los pisos de todo el bloque para construir apartamentos más pequeños para alquilarlos a turistas.

En su caso, aprovecharon un resquicio de la Ley de Arrendamientos Urbanos de 1964 para llevarle ante los tribunales para lograr su desalojo.

Crear una sociedad limitada

Según Pi de la Serra, su abogados le recomendaron hace años que, para gestionar la facturación de su labor musical, creara una sociedad limitada -Pit i Cançó-, que domicilió en su vivienda, que también le sirve de espacio para la composición musical.

Obligado por la ley, puso una placa en su buzón con el nombre de esta nueva sociedad, lo que permitió a la empresa inmobiliaria a llevarlo ante el juez por vulnerar la ley de arrendamientos,

al considerar que un inquilino de un piso no puede instalar una industria en el inmueble.

Ante esta situación, hace un año un juez de primera instancia sentenció en su contra, pese a que en una visita ocular a su casa el juez no encontró ningún tipo de actividad ni instalación

empresarial, sino únicamente sus inseparables guitarras.

Recurso de apelación

Además, el cantautor arguyó que ya había cambiado la sede de Pit i Cançó, que ahora se encuentra en una masía del Montseny propiedad de su familia, si bien el juez receló de este extremo al dudar de que una empresa se pueda instalar en casa sin instalación de gas.

Al recibir la sentencia en contra, Quico Pi de la Serra presentó un recurso de apelación a la Audiencia de Barcelona, que fallará el próximo 4 de marzo.

"Es un caso clarísimo de mobbing", se ha quejado el artista, que sostiene que no sabe dónde podrá vivir y componer a partir de ahora si finalmente le echan de su casa de toda la vida.

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