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España sube ocho puestos y ocupa el 33 en la lista de respeto a la libertad de prensa

Reporteros sin Fronteras señala la ruptura de la tregua de ETA como una amenaza para la profesión y sitúa a Eritrea como el estado peor valorado

Eritrea sucede a Corea del Norte como el peor país para la libertad de prensa en el mundo, según la clasificación de 169 Estados publicada hoy por la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), por sexto año consecutivo, si bien no se conocen todos los datos en Corea del Norte o Turkmenistán, tercero peor valorado. En España, que ocupa el puesto 33 de la lista y sube ocho posiciones, la ruptura de la tregua de ETA supone una amenaza para la profesión y muchos periodistas necesitan protección policial para trabajar, según señala RSF.

"Nos sentimos particularmente preocupados por la situación en Birmania (que ocupa el puesto 164). La feroz represión de la Junta Militar en el poder a las manifestaciones no augura nada bueno para el futuro de las libertades fundamentales en el país. Los periodistas continúan trabajando bajo el yugo de una censura implacable a la que no se le escapa nada, ni siquiera los anuncios por palabras", ha señalado los responsables de Reporteros Sin Fronteras, quienes también lamentan la situación en China. "Pekín sigue estancado en las profundidades de la clasificación; cuando falta menos un año para los Juegos Olímpicos, las tantas veces prometidas por las autoridades reformas y puestas en libertad de periodistas no parecen más que una vana ilusión", han afirmado.

Fuera de Europa, a la que pertenecen los primeros 14 países de la clasificación, ninguna región del mundo queda al margen de la censura o la violencia con los profesionales de los medios de comunicación. Entre los 20 peor clasificados se encuentran siete asiáticos (Pakistán, Sri Lanka, Laos, Vietnam, China, Birmania y Corea del Norte), cinco africanos (Etiopía, Guinea Ecuatorial, Libia, Somalia y Eritrea), cuatro de Oriente Medio (Siria, Irak, Territorios Palestinos e Irán), tres del antiguo espacio soviético (Bielorrusia, Uzbekistán y Turkmenistán) y un americano (Cuba).

Mejoría en los países del G-8

Los miembros del G-8 experimentan una ligera mejoría, salvo Rusia Mientras que, desde hacía tres años, no cesaban de caer, los estados más industrializados han ganado algunas posiciones. Francia (31) por ejemplo, sube seis puestos en relación con el año pasado. Los periodistas se han visto libres de la violencia que les afectó a finales de 2005, con motivo de un conflicto sindical en Córcega y de las manifestaciones en los suburbios. Sin embargo, continúa dándose situaciones preocupantes ante la persistencia de casos de censura, registros en redacciones y falta de garantías en lo que se refiere al secreto de las fuentes. Rusia, en el puesto 144, en cambio no avanza. El asesinato de Anna Politkovskaya, en octubre de 2006, la impunidad de los asesinos de periodistas y la siempre lacerante falta de pluralismo en los medios de comunicación, tienen un peso enorme en el balance de la situación de la libertad de expresión en el país.

En Estados Unidos (48), las violaciones de la libertad de prensa han descendido ligeramente. El blogger Josh Wolf salió en libertad tras permanecer detenido 224 días, y los repetidos atentados a la protección de las fuentes parecen ir desapareciendo En cambio, la detención sin cargos en la base militar de Guantánamo, desde el 13 de junio de 2002, del camarógrafo sudanés Sami Al-Haj, y el asesinato de Chauncey Bailey en Oakland, en agosto de 2007, siguen impidiendo que el país acceda al pelotón de cabeza.

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