El visitante escurridizo
Un caimán de metro y medio aparecido en un lago de California se resiste a ser capturado
El pequeño lago Machado del suburbio de Harbor City en Los Angeles (EE UU) experimenta desde hace una semana más agitación de la normal. Cientos de curiosos se agolpan en las orillas para tratar de divisar a su nuevo inquilino, un caimán de metro y medio. El pasado miércoles, un pescador fue el primero en percatarse de su presencia, cuando el reptil dio buena cuenta de todos sus cebos. Todos los dispositivos que se han desplegado desde entonces para capturarlo han resultado infructutosos.
El personal del parque donde está el lago está convencido de que el caimán fue en su día una mascota de la que se alguien se desembarazó cuando empezó a crecer.
Las autoridades han prohibido el baño en las aguas del lago, ya que el caimán por su tamaño, es perfectamente capaz de atacar y devorar a una persona.
La advertencia no ha hecho sino propiciar el que cientos de personas se acerquen hasta el lugar para intentar ver al reptil y contemplar todo el dispositivo desplegado para su captura. Policía, bomberos, personal del parque y especialistas en este tipo de animales patrullan por el lago de poco más de 2 kilómetros cuadrados de superficie arrojando pollos muertos al agua para intentar atraer la atención del animal. Todos van provistos de redes y cinta aislante para inutilizar sus fauces.
Un cazador para capturarlo
El caimán parece sentirse intimidado por la cantidad de barcos que recorren el lago y los pollos muertos no han conseguido tentarle. El ayuntamiento de Harbor City ha contratado ya a un cazador en vista del poco éxito del sistema empleado.
Por su parte, el zoo de Los Angeles ya ha dicho que está interesado en quedarse con el animal, una vez sea capturado.
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