Los servicios sociales de Málaga atendieron en 13 ocasiones a la mujer asesinada ayer por su pareja

El Ayuntamiento de Málaga prestó asistencia social hasta en 13 ocasiones a la mujer de 26 años de nacionalidad rusa que falleció ayer, junto a su hijo de ocho meses, al ser apuñalada por su pareja. En todo ese tiempo, Irina P. no interpuso, sin embargo, ninguna denuncia contra su compañero.

Los técnicos municipales "aconsejaron en todas las ocasiones" a Irina P. la necesidad de separarse de su pareja y denunciar las agresiones, pero ésta se negó a hacerlo o a acudir al juzgado, según han informado fuentes del Ayuntamiento de Málaga.

La mujer mantenía una relación con su compañero, el ucraniano Ihor D., de 38 años, de aproximadamente dos años, y se encontraba en España como inmigrante en situación irregular, "no hablaba ni entendía bien español", han señalado las fuentes. Por su parte, el presunto agresor lleva en España doce años con documentación en regla y trabajos en sectores como la construcción, según las fuentes.

"Separarse y denunciar"

El primer contacto de la víctima con el Ayuntamiento se produjo en junio de 2003, cuando ésta solicitó ayuda económica para su bebé, cuyo nacimiento estaba previsto en agosto.

La primera actuación se dirigió a "regularizar su documentación", en concreto su empadronamiento, y después se produjeron cinco entrevistas de trabajo antes de su derivación al área de la Mujer, el pasado febrero, cuando manifestó sufrir malos tratos, aunque no aportó denuncia ni parte de lesiones. En las entrevistas con los técnicos del área de la Mujer, la primera de ellas el pasado 15 de marzo, se le aconsejó "separarse y denunciar" y se le comunicó la posibilidad de acogida.

A la segunda cita concertada no acudió, y en la primera semana de abril los servicios sociales de Ciudad Jardín se desplazaron a su domicilio, donde se encontraba su pareja, por lo que se le invitó a que acudiera al Centro de Servicios Sociales esa misma semana, y se le informó de la prestación de becas para guarderías.

En otra entrevista manifestó que tenía una "gran dependencia emocional, afectiva y económica" de su pareja, cuando se le reiteró el mensaje de que denunciase que sufría malos tratos.

El pasado 19 de abril, acudió con su compañero a la comisaría para solicitar la residencia, y se le comentó que necesitaba inscribir al niño con el padre en su pasaporte, para lo que tendrían que desplazarse a Madrid al consulado de Ucrania. Después de que manifestasen que no tenían dinero para el viaje, los técnicos le ofrecieron la posibilidad de financiarle el viaje y los gastos de tramitación en el consulado, ocasión en la que ella comentó que él estaba "mucho más tranquilo". La pareja debía acudir al área de la Mujer para una nueva cita mañana 30 de abril, para confirmar la cantidad necesaria para el viaje. No obstante, el pasado día 20 la mujer acudió al centro de Servicios Sociales de Ciudad Jardín para ultimar la información sobre empleo y sobre la guardería, y allí manifestó que ambos habían decidido no continuar la relación de pareja y que iban a buscar piso y trabajo por separado.