LA OFENSIVA CONTRA EL 'BOTELLÓN'

Madrid aprueba un proyecto de Ley que prohíbe beber en la calle salvo en las terrazas

En determinadas fiestas populares también se permitirá el consumo.- Las gasolineras no podrán vender alcohol y las tiendas de alimentación tendrán que obtener una segunda licencia

Madrid - 07 mar 2002 - 00:00CET

El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado esta mañana el proyecto de Ley sobre Drogodependencias en el que se establece la prohibición total de consumir alcohol en la vía pública, salvo en terrazas y durante las fiestas patronales.

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PROYECTO DE LEY SOBRE DROGODEPENDENCIAS

No se podrá consumir alcohol en la vía pública, salvo en terrazas y fiestas patronales.

Los consumidores que beban en la calle podrían ser sancionados con el cumplimiento de trabajos sociales.

No se podrá vender alcohol en gasolineras, puestos ambulantes y máquinas automáticas.

En los autoservicios la venta de alcohol se hará con anuncios de la prohibición de comprar para los menores de 18 años.

En las grandes superficies se vigilará especialmente la dispensación de bebidas a menores.

Se establecerá una segunda licencia para las tiendas de alimentación que quieran vender este tipo de bebidas.

Las operadoras de televisión y radio que son competencia de la Comunidad no podrán publicitar bebidas alcohólicas de más de 18 grados.

La publicidad de alcohol y tabaco no podrá ir dirigida a menores, no utilizará la imagen de estos ni irá asociada al éxito social o sexual.

Para adquirir tabaco se exigirá una edad de 18 años en lugar de los 16 actuales.

En los centros públicos no podrá exhibirse publicidad alguna sobre tabaco o alcohol ni se podrá consumir alcohol de más de 18 grados.

Los menores de 18 años tendrán prohibido el acceso a salas de ocio en las que se venda alcohol.

Los médicos que atiendan a un menor con intoxicación por consumo de drogas o alcohol tendrán obligación de avisar a sus padres o tutores, y si no los localizan deberán dar parte a la Fiscalía de Menores.

Los establecimientos que incurran en infracción muy grave podrán ser sancionados con multa de hasta 600.000 euros o cierre del local.

Unos jóvenes adolescentes, beben calimocho y litronas botellón, en la plaza de Barceló de Madrid.SANTIAGO BURGOS

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