‘Sports Illustrated’ muestra por primera vez en portada a una mujer con cicatriz de cesárea
La modelo Kelly Hughes se ha convertido en la primera mujer en protagonizar la edición de baño de la revista estadounidense mostrando la marca de un parto por cesárea.
Por primera vez en los 58 años de historia de Sports Illustrated Swimsuit, la edición anual de trajes de baño de la publicación estadounidense Sports Illustrated, la revista ha mostrado a una modelo con una cicatriz de cesárea en su portada. Una iniciativa en colaboración con la marca Frida Mom, especializada en productos de embarazo y postparto, que normaliza y visibiliza los cambios corporales por los que atraviesan las mujeres tras la maternidad, y que tan silenciados continúan estando en la actualidad.
En la portada, la modelo Kelly Hughes posa frente a la cámara mientras se baja ligeramente la parte inferior del bikini para dejar ver su cicatriz. «Demos un poco de amor a todas nuestras mamás para que reconozcan el poder del cuerpo femenino y la belleza de la maternidad», han escrito desde la revista a través de Instagram.
La modelo, quien también ha compartido la imagen, ha asegurado «sentirse muy honrada» de ser la primera mujer en exponer su cicatriz de cesárea en la portada de la cabecera estadounidense. «He luchado mucho tiempo contra las inseguridades que me provocaba mi cicatriz, ya que soy modelo y mi recuperación fue increíblemente difícil. No fue hasta que la acepté cuando experimenté su verdadero poder«, ha escrito en el pie de foto. Hughes, de 42 años, es una modelo y diseñadora de joyas residente en Miami, quien comparte activamente sus vivencias como madre a través de Instagram, donde acumula más de 50.000 seguidores.
Cada año, la revista Sports Illustrated publica su edición Swimsuit con una modelo en bañador en portada y con las páginas interiores repletas de mujeres posando también en trajes de baño. Heidi Klum, Irina Shayk, Tyra Banks o la española Judit Mascó son algunos de los rostros que han copado la portada del número a lo largo de los casi 60 años de historia de la revista, que se ha posicionado como una de las más codiciadas de la industria. En los últimos años, las tradicionales portadas de modelos con medidas perfectas han abierto paso a mujeres con cuerpos más diversos. Un ejemplo de ello es el de la estadounidense Ashley Graham, quien se convirtió en 2016 en la primera modelo de tallas grandes en ocupar la ansiada portada.
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