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Si yo fuera hombre

Patillas gruesas y generosas, bigotes elegantes y recortados, barbas incipientes y maquillaje mate. Cuatro cantantes y actrices españolas se han atrevido a ponerse en la piel y en las ropas de ellos. Una transformación de impacto.

Belleza masculina

Si yo fuera hombre…

KIRA MIRÓ
«Prescindiría de la depilación» «Las mujeres somos mucho más esclavas de nuestro cuerpo que los hombres. Envidio cómo bajan ellos a la playa, sin ninguna preparación, mientras yo me miro al milímetro las raíces del pelo, las manos y los pies», dice la actriz Kira Miró, que actúa en la obra La verdad en el Teatro Cofidis de Madrid. «Si fuera chico, llevaría un rollo surfero».

VEGA
«Los cuidados de las mujeres son un lujo» La cantante, después de su nominación al Grammy Latino, confiesa que si fuera un chico, se dejaría pelo por el cuerpo. «El resto de cuidados son la excusa perfecta para dedicar tiempo a uno mismo, relajarse y levantar el pie del acelerador».

Vega lleva americana de Giorgio Armani, camisa de Valentino y corbata de BOSS Black.

Pablo Zamora

ANA MILÁN
«En cuanto a ropa masculina, me encanta el estilo de Tom Ford, traje negro impecable con camisas italianas de cuello armado», cuenta la actriz, quien junto a Fernando Guillén Cuervo representa Wilt en el Teatro Bellas Artes de Madrid. «También me gustan mucho las barbas, así que luciría una seguro». A

LAURA PAMPLONA
«Con 17 años quería ser un chico para hacer la mili (estaba atontada)»  La actriz y cantante acaba de rodar La Bella y la Bestia para Antena 3, actúa en la última temporada de Los misterios de Laura de TVE y está inmersa en su proyecto musical Sweet Wasabi. Se siente a gusto con las patillas, «las llevaría seguro, me decantaría por un look muy británico y Paul Smith sería mi diseñador fetiche. También dejaría a un lado los tratamientos para la piel y para el cabello».

Ana Milán viste blazer de Valentino, camisa de BOSS Black y pañuelo de Hermès.

Pablo Zamora

En busca del lado masculino

Crear ángulos, borrar brillos, engrosar las cejas y retirar la melena: esas son las claves para sacar a relucir el look andrógino que todas llevamos dentro.

No somos 100% hombre ni 100% mujer», asegura Ángeles Sanz, psicóloga clínica y profesora de la Universidad Autónoma de Madrid. «Las mujeres también tenemos testosterona, aunque la cantidad es menor que la de los estrógenos. Así que fisiológicamente sí contamos con una parte masculina», comenta la experta. Su colega Marga Ors, sin embargo, apunta que el cerebro de los hombres es diferente del femenino. «Por ejemplo, nuestra amígdala, responsable de las emociones, está más desarrollada. Por eso, ellos son más cerebrales y prácticos, y nosotras, más emocionales». El lado andrógino se puede potenciar y, de hecho, está de moda: maquillaje natural (Blugirl, Barbara Bui…), pómulos marcados (Haider Ackermann, Thierry Mugler), raya del pelo al lado (Dior, Loewe…), cejas pobladas (Blumarine, Peter Pilotto)… esos son los códigos estéticos que precisamente imperan este otoño-invierno.

Maquillaje bajo mínimos
La dermis femenina es más luminosa que la masculina. «Para un acabado mate se aplican polvos ligeros», indica Maite Tuset, artista senior de MAC. La piel masculina es irregular y parece cansada. «Para imitarla se pone sombra marrón con matices violetas alrededor del ojo; potencia la ojera», añade. Los iluminadores están vetados; el objetivo es un lienzo nude. Para lograrlo se aplican bases ligeras con los dedos. «Para crear ángulos se oscurecen los huesos de la sien, la barbilla y el pómulo con bronceador», afirma Rebeca Lombardo, de L’Oréal Paris.

Cejas poderosas
La mujeres lucen unas cejas arqueadas y finas; los hombres, gruesas y rectas. Conclusión: se deben engrosar y respetar su color con un producto específico. «Se trabajan en pequeños trazos con una sombra carbón o marrón aplicada con pincel biselado y fino para potenciar la forma horizontal y ensancharlas», apunta Tusset. El uso de la máscara de pestañas está desaconsejado en la mayoría de los casos. «Se puede optar por una transparente», propone García.

Adiós al pelo largo
Las melenas interminables se pueden transformar en peinados cortos. «Pero antes, es conveniente pasar la plancha para homogeneizar», describe Kenna, director creativo de GHD. «Sugiero optar por la raya a la izquierda y recoger en una coleta baja», propone Carlos Fernández, formador de Franck Provost. Para un falso flequillo, el aliado es el gel de efecto mojado: se separan mechones delanteros, se giran y se dejan caer sobre la frente. Otra opción es un falso corto. «Se hace un moño y se enrolla la parte delantera en cuatro rulos con espray. Se suelta y se hace un tupé con el mechón», afirma Óscar Guinea,
del salón Óscar G.

Laura lleva blazer de BOSS Black, camisa de Lanvin y fular de Gucci.

Pablo Zamora

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