Saint Laurent y el regreso de las botas yeti

Ni botines chelsea ni botas cut out. Este invierno los pies estarán más abrigados que nunca gracias al pelo. Eso sí, que nadie espere discretos forros de borreguito, acabados en piel de potro o pequeños detalles peludos. La bota estilo yeti ha decidido regresar y reinventarse en su versión más exagerada.

Los diseñadores que quieren convertir las calles en una emplazamiento après ski llevan varias temporadas intentándolo. Recordando algunos ejemplos, Chanel apostó fuerte por ellas en 2010, Dolce & Gabbana hizo lo propio la misma temporada y Michael Kors continuaba la tendencia un par de años después. Ahora, por obra y gracia de Hedi Slimane cualquiera que desee convertirse en mujer de las nieves y tenga 1.395 euros para invertir en un par de botas italianas hechas a mano, puede hacerse con el modelo de pelo largo negro que ha lanzado Saint Laurent. Que el calor no le amedrante porque están a punto de agotarse en Net-A-Porter.

La buena noticia es que quien no consiga hacerse con uno de los codiciados pares, tiene un amplio abanico de posibilidades en las que invertir, pues no sólo la maison francesa apuesta por este exagerado modelo para abrigar nuestros pies esta temporada.

Isabel Marant ha mostrado una opción algo más discreta (si se puede llamar así) aunque igual de peluda. Al más puro estilo prehistórico, la diseñadora apostó en su colección otoño-invierno 2014/2015 por botas de pelo con tacón que mezclan distintas tonalidades, un modelo que recuerda inevitablemente a uno de los diseños de la colección invernal de 2012/13 de Michael Kors.

Después de las plataformas de aires deportivos, Marant apuesta por las botas peludas con tacón.

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Sarah Burton tampoco se quedó corta (en lo que a pelo se refiere) en su calzado para Alexander McQueen. La firma defendió sobre la pasarela que más allá de las sneakers abotinadas con cuña que popularizó Marant, las zapatillas tipo botín también pueden llevar puntera metalizada y pelo por doquier en toda suerte de formas y longitudes.

Otras firmas que pasan más inadvertidas para el gran público también han querido hacer su aportación a la tendencia peluda. Marques Almeida, Tracy Reese o MSGM han actualizado las zapatillas, los 'mules' o los mocasines, sumándoles el material estrella del invierno: el pelo.

Así es la propuesta peluda de Almeida y Alexander McQueen.

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Tracy Reese o MSGM también se suman a la tendencia.

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Las opciones más femeninas llegan de la mano de Osman o Chloé que disminuyen notablemente la longitud y densidad del pelo y lo utilizan para envolver delicados zapatos de salón.

Las opciones elegantes llegan de la mano de Osman o Chloé.

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La enésima versión quizá es la más disparatada. Si otras temporadas nos ha resultado inexplicable que firmas como Prada, Miu Miu, Céline o Fendi hayan defendido el uso de zapatos peludos durante el verano en pasadas colecciones, es igualmente difícil de entender la apuesta por las sandalias con pelo para el invierno. Ahí están los directores creativos y la imperante tendencia que desdibuja los límites entre estaciones para recordarnos que nada es imposible en lo que a moda se refiere. Pierre Braganza subió a la pasarela sandalias abotinadas de tacón y largo pelo, Antipodium le puso 'barba' blanca y calcetines a su diseño más veraniego y Vionnet reinterpretó las sandalias de pelo de Céline.

Las opciones ‘invernal-veraniegas’ de Braganza, Antipodium y Vionnet.

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Sea como sea, y teniendo en cuenta que las botas peludas ya hicieron su inmersión en la calle hace unos años, es más que probable que cuando el low cost muestre sin tapujos las cartas que guarda para el próximo invierno, las botas al más puro estilo yeti formen parte de la baraja.

A la izquierda, las botas ‘yeti’ que Chanel propuso para el invierno 2010. A la derecha, un reciente look de ‘street style’.

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