Vuelve el Furby

Hace 14 años volaba de las tiendas y volvía locos a muchos padres incautos. Ahora vuelve igual de peludo y adorable y convertido pero más acorde con los tiempos. Hasbro, la megaempresa juguetera, acaba de mostrar como será la versión 2012 del Furby, aquel muñeco que arrasó en 1998 y que tenía la ¿virtud? de ser tan imprevisible como un niño de carne y hueso. El Furby original hablaba. Y mucho. Y además no tenía botón de off. Para callarlo, era necesario extirparle las cuatro pilas.

En la versión actual, el muñeco robot (estéticamente un primo hermano de los Gremlins buenos y conceptualmente un pariente del Tamagotchi) es aún más “abrazable”, según Hasbro. Está conectado a una aplicación que le permite hablar con un iPad o con otro Furby; lleva un micrófono interno y sus ojos de LCD se iluminan cuando reacciona a los impulsos. El nuevo Furby es capaz de mover las orejas, bailar y distinguir entre diferentes voces humanas. Si le hacen cosquillas en la barriga, deja ir una risilla algo desconcertante. Para que cese su actividad, hay que conseguir calmarlo y ponerlo a dormir, al igual que había que hacer con los primeros muñecos.

El muñeco se lanzará al mercado en Estados Unidos en otoño, con un precio de 60 dólares, y se espera que sea uno de los juguetes más buscados en Navidad.