Cannabis para sibaritas: la revista femenina que hace de fumar hierba un placer estético
Entrevistamos a la fundadora de ‘Broccoli’, una publicación dirigida al público femenino que derriba el estigma del cannabis.
«Broccoli es la revista internacional para los amantes del cannabis. Creada por mujeres que aman la hierba, es una revista que presenta una nueva perspectiva de la cultura del cannabis. Juguetona, informada, ecléctica y reflexiva, fomenta el descubrimiento y la apreciación inteligente del cannabis a través de exploraciones del arte, la cultura y la moda».
Así se presenta este magazine en su web, una revista hecha por y para mujeres que tienen una pasión en común: la hierba. Semejante ocurrencia empezó allá por noviembre de 2017 con una premisa clara: romper ciertos tabúes en el campo del consumo de cannabis. El primero, dirigirse a un público eminentemente femenino en un mercado que parecía exclusivamente dominado por los hombres. El segundo, hacerlo con un exquisito envoltorio (Anja Charbonneau, fundadora de Broccoli, fue anteriormente directora creativa de la sencilla y elegante publicación independiente Kinfolk) en un campo que hasta ese momento destacaba por su estética -digamos- cochambrosa. Y tercero, cambiar el estereotipo del fumeta para convertirlo en alguien cool e inquieto.
Con casi una decena de números publicados (acaba de salir el noveno a la venta), han conseguido convertirse en una publicación de referencia en un mercado que en 2017 movía más de diez millones de dólares en el mundo y que, según New Frontier Data, podría alcanzar en 2025 los casi treinta millones (entre uso médico y uso legal adulto). Una visibilización del consumo necesaria en un país, Estados Unidos, en el que en 33 estados se permite su uso medicinal y en once su uso recreativo, y que parece continuar la estela de series como la maravillosa High Maintenance. Creada por Katja Blichfeld y Ben Sinclair, la serie -que empezó como webserie en noviembre de 2012 para acabar convirtiéndose en 2016 en una de las imprescindibles de HBO- narra las aventuras de un camello de marihuana guapo y molón que recorre las calles de Nueva York a lomos de su bicicleta entregando la mercancía.
Hablamos con Anja Charbonneau sobre Broccoli y sus bondades.
¿Por qué Broccoli?
Es uno de los términos menos conocidos para referirse a la hierba. Pero hay más palabras de temática vegetal en referencia a este tema, como por ejemplo salad (ensalada). ¡Nos encantan las palabras verdes!
¿Por qué decidís dirigiros a las mujeres?
Hasta hace poco, los medios de comunicación del cannabis estaban dirigidos en gran parte por hombres y no había un espacio para que las mujeres o las personas no binarias expresaran cómo se sienten acerca de su relación con la hierba y queríamos expresar lo versátil que puede llegar a ser. Utilizar el arte y la cultura nos ayuda a mostrar la planta como nosotras la vemos: como una parte hermosa, compleja y fascinante de la vida.
Pero ¿es la marihuana una sustancia esencialmente consumida por mujeres?
Una de las cosas fascinantes del cannabis es que no hay un tipo de consumidor. Gente de diferentes géneros, edades, razas o procedencias culturales consumen marihuana. Por supuesto, no es para todos, pero con la creciente legalización es cada vez más fácil ver lo ampliamente se utiliza.
Y vuestra redacción, ¿sigue siendo totalmente femenina o no binaria?
Sí, en este momento nuestro personal es todo femenino, pero nuestros colaboradores, no. En general hay una mayoría de mujeres, pero queremos dejar claro que cualquiera puede participar en la revista como colaborador o como lector siempre y cuando sienta que el mágico mundo del Broccoli es su lugar…
Casi tres años y nueve números después, ¿qué es lo más emocionante que ha sucedido en el universo Broccoli?
¡Nuestra comunidad global! Nunca esperamos que la revista llegara a tanta gente. La hemos enviado a más de 50 países de todo el mundo, y nos encanta cuando la gente nos escribe para contarnos cómo es la cultura del cannabis allí donde viven.
Parece que habéis llegado para acabar con esa tendencia ‘feísta’ que, habitualmente, ha imperado en el universo del cannabis.
Eso está cambiando mucho, pero en 2017, cuando se lanzó Broccoli, era completamente cierto. La fotografía y el diseño que rodeaban al cannabis se centraba principalmente en la industria y en la fabricación. Este fue uno de los factores por los que quisimos comenzar la revista, porque vimos el cannabis como algo hermoso. Al expresar creatividad con el cannabis, estamos ayudando a la gente a entender que no es algo malo y les ayudamos a sentirse más cómodos con la hierba.
¿Es esa la misión de vuestra revista: romper el estereotipo del consumidor, hacerlo chic o que, al menos, pueda reconocerse como tal sin problemas?
Efectivamente, la revista es una herramienta útil para ayudar a romper estereotipos. Broccoli muestra que puedes consumir cannabis y aUn así ser alguien inteligente, creativo y profesional. Mucha gente todavía cree que el cannabis es malo o que te vuelve perezoso… Muchos de nuestros lectores nunca han visto que el cannabis se muestre de manera positiva, por lo que esto ayuda a la gente a sentirse parte de una comunidad de apoyo.
¿Habéis tenido algún problema por el hecho de ser una revista dedicada a la marihuana?
En realidad no trabajamos con la planta, solo somos una revista, con lo que no nos enfrentamos a muchas restricciones legales. También es cierto que nuestra sede está en Oregón, donde el cannabis es totalmente legal para mayores de 21 años.
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