De compras por Barcelona: cinco paradas para conocer las propuestas más alternativas de la ciudad
Recorremos la capital catalana al volante del nuevo Ford Puma, un SUV híbrido y urbano diseñado para exprimir al máximo la ciudad. Estos son los barrios y tiendas que no te debes perder
Colm Tóibín escribía todos los días, de lunes a domingo, en su juventud. Entonces el novelista irlandés descubrió Barcelona. «Allí la vida era demasiado emocionante para escribir», se justificaría el autor de Madres e hijas, que durante la Transición vivió en esas calles de libertad y despertar sexual que se acabarían colando después en sus novelas. Y a pesar del excesivo turismo –una queja a la que se ha sumado el propio escritor en distintas entrevistas–, esa sensación de agitación todavía perdura. Porque la capital catalana sigue siendo bulliciosa, moderna y sorprendente. Su propuesta cultural y comercial es como su fascinante arquitectura: una amalgama ecléctica, capaz de aunar distintas épocas y estilos.
Hay muchas formas de redescubrir Barcelona, por ejemplo, al volante de un coche que comparte su mismo espíritu contemporáneo y vanguardista: el nuevo Ford Puma. Este SUV híbrido, que se beneficia del plan Renove 2020 y cuenta con el certificado medioambiental ‘eco’, es nuestro mejor aliado urbano para recorrer las calles de forma segura. Gracias a sus innovadores motores EcoBoost, cuyo sistema combina un motor eléctrico que da soporte al de gasolina y mejora la eficiencia del combustible mientras reduce las emisiones, podemos disfrutar de una jornada de compras de forma segura y limpia.
Hibridación en Poble Nou
Ha dejado de ser el ‘Manchester catalán’ para alzarse en el barrio de moda. En la zona industrial de Barcelona, los hangares se han reconvertido hoy en estudios de diseño, talleres de artistas o tiendas de lo más original. Propuestas tan heterogéneas como la arquitectura que conforma Poblenou. Espai Joliu (Carrer de Badajoz, 95) es un buen ejemplo para ilustrar esa huida de lo convencional, un espacio que fusiona las dos grandes fiebres de Instagram: el café de autor y las plantas. Su creadora, Lucía, vivió en Berlín durante años y se inspiró en el estilo minimalista de la capital germana para decorarlo. Otra propuesta curiosa es la de su vecina Alblanc (Carrer de Badajoz, 90), un atelier dedicado al estilismo floral cuya propuesta abarca desde plantas y macetas a mobiliario sencillo para el hogar.
Porque el interiorismo también está muy presente en Poblenou. Noak Room (Carrer de Roc Boronat, 69) comparte esa misma estética industrial aunque su especialidad es el diseño escandinavo. Una tienda de decoración con piezas únicas bajo la etiqueta“vintage contemporáneo”. Para los más estetas y soñadores, pasarse por Brutus de Gaper (Carrer de Pamplona, 60) es religión. La pantalla táctil del nuevo Ford Puma nos indica el camino gracias al sistema de conectividad Ford SYNC 3, que permite al conductor controlar el teléfono, la música y el sistema de navegación a través de la voz. Aparcamos así delante de esta gran nave industrial: 450 metros cuadrados repletos de auténticas maravillas vintage, piezas únicas especializadas en art déco y mid century.
Diferenciación en El Born
Vale la pena perderse por las calles medievales de El Born y dejarse sorprender. Ese es el efecto que produce Ivori (Carrer dels Mirallers, 7), la tienda de las diseñadoras Carola Alexandre y Alba Neddermann, en donde venden su firma de inspiración retro, Alexandre Neddermann, y dan cobijo a nuevos creadores catalanes con una misma visión de la moda: ética y cuidada. La boutique Colmado (Carrer de Brosolí, 5), de Susana Rey, comparte una filosofía similar: ofrecer una selección de prendas y accesorios bonitos, cuidados y delicados. Prendas de patrones relajados que encajan a la perfección con ese estilo jenesaisquoi tan envidiado de las parisinas. Tampoco Nu Sabates (Carrer dels Cotoners, 14) se podría etiquetar de convencional. Esta zapatería de barrio, dirigida por el diseñador Evarist Bertran, apuesta por el calzado artesanal y los tejidos vegetales, con unos diseños solo aptos para los más atrevidos. Con el Ford Co-Pilot360, un conjunto de tecnologías de asistencia al conductor, la conducción por las calles del barrio, bastante limitada, es más sencilla de lo que parece. El asistente inteligente de velocidad reconoce las señales en carretera, regulando la velocidad del vehículo al límite establecido. Con el sistema de frenada de emergencia, que ofrece una mayor agilidad de respuesta en la dirección ante obstáculos imprevistos, aparcamos sin ningún sobresalto.
Originalidad en El Raval
Es el barrio bullicioso y multicultural de Barcelona. Si con la construcción del MACBA, de Richard Meier, en 1995 llegó el resurgir cultural –la tienda del museo es una parada obligatoria, tanto por su selección de libros y objetos como por su interiorismo moderno y colorista–, con el tiempo sus callejuelas han albergado propuestas diferentes y originales. Gracias al certificado eco del nuevo Ford Puma –sus innovadores motores EcoBoost consumen menos combustible y reducen las emisiones de carbono–, podemos movernos por el centro sin restricciones. Porque el SUV de la marca se caracteriza por su eficiencia: incorpora un propulsor eléctrico que ayuda a mejorar el rendimiento del vehículo, proporcionando apoyo adicional al motor de gasolina cuando es necesario. Además, para recargar su batería de 48 V no necesita conectarse externamente, sino que alimenta durante la conducción. Los frenos regenerativos recuperan la energía para recargarla, una energía que de otro modo se perdería. Para aquellos que en cambio hacen muchos kilómetros, el nuevo Ford Puma también está disponible en motor diésel 1.5 EcoBlue de 120 CV y la posibilidad de montar una nueva transmisión automática de doble embrague de siete velocidades. ¿Qué significa esto? Una mayor eficiencia del combustible y dinámica de conducción.
Con nuestro SUV híbrido llegamos así a Les Topettes (Carrer de Joaquin Costa, 33), una perfumería de autor con marcas procedentes de todas las partes del mundo y jabones ecológicos con aroma a naturaleza. Muy cerca está Fantastik (Carrer de Joaquín Costa, 62), otro bazar colorista repleto de objetos insólitos. Pero si algo destaca en El Raval son las tiendas especializadas, como Discos Paradiso (Carrer de Ferlandina, 39), con auténticas rarezas musicales y una fuerte preocupación por promover y distribuir a pequeños sellos independientes; o la librería Lata Peinada (Carrer de la Verge, 10), la primera especializada en literatura latinoamericana.
Deco en L’Eixample
Con grandes y luminosas avenidas de distribución germana, en este barrio modernista están las galerías y las tiendas de interiorismo más interesantes de la ciudad. Ejemplo de ello es el concept store del interiorista Jaime Beriestain (Pau Claris, 167), un local atípico en donde tanto selecciona muebles y objetos traídos de todo el mundo, como elige la carta del restaurante que también aloja. Otro lugar de culto es ObjetodeDeseo (Carrer del Consell de Cent, 292) o, como se definen a sí mismos, “un gabinete de curiosidades contemporáneo”: piezas de cerámica, porcelana, cristal… «por las que merece la pena vivir». La casa Malagrida, un increíble edificio palaciego de estilo modernista diseñado por el arquitecto Joaquim Codina, acoge Anthropologie (Passeig de Gràcia, 27), la tercera tienda física de la marca en el mundo. Un paraíso perdido en el que podemos encontrar de todo, desde ropa y accesorios a utensilios y muebles para el hogar. El nuevo Ford Puma es el aliado perfecto para sucumbir a las compras. Incluye un compartimento de carga inferior llamado MegaBox, un compartimento inteligente de 80 litros que permite cargar artículos de hasta 115 cm de altura o guardar objetos mojados o con riesgo a manchar (una planta grande, por ejemplo) ya que cuenta con un ingenioso sistema de drenaje.
Artesanía en Gràcia
Es la resistencia. Gràcia conserva esa esencia a barrio de toda la vida –algo cada vez más difícil en el centro de las grandes ciudades–, en el que tratan de poner freno a la gentrificación, protegiendo su comercio local y ofreciendo una visión alternativa del consumo. Llegamos al barrio de forma segura con el Ford Puma, cruzando la ciudad con el modo Sport, uno de los cinco modos de conducción personalizables, que no solo adapta el comportamiento de marchas y la dirección según el estilo del conductor, también personaliza el diseño y color del panel digital de 12,3″. Con el sistema de aparcamiento asistido, que localiza los espacios libres disponibles y efectúa la maniobras de aparcamiento de forma automática, aparcamos de forma sencilla en un buen sitio del barrio.
La larguísima calle Verdi espera, repleta de opciones creativas y curiosas. Picnic (c/ Verdi, 17) es ejemplo de ello, un espacio minimalista de estilo escandinavo en el que sus propietarios, Juan Rodríguez y Raquel Bárcena, dan rienda suelta a sus filias y fobias: hay alpargatas artesanales de Pölka Shoes, prendas de marcas sostenibles como Behulah o Rains o accesorios urbanos de firmas como Ölend o Lefrik. «Welcome to the beauty of imperfection» (Bienvenidos a la belleza de la imperfección) es el mensaje de bienvenida que reza el instagram de Pia Barcelona, una marca de joyería artesanal inspirada en la naturaleza. En su atelier (Verdi, 3), la diseñadora Pia Amat crea estas piezas de estética vintage y espíritu místico, que beben de corrientes tan dispares como el Imperio Otomano o el art nouveau, y parte de las ventas van destinadas a distintas ONGs. Igual de interesantes son las propuestas culinarias del barrio. Porque Grácia es sinónimo de buena gastronomía. Prueba de ello son locales auténticos como La Trini (c/ Verdi, 30), un restaurante de regusto ochentero y cocina catalana, o Salvatge (c/ Verdi, 50), una vinacoteca sin pretensiones en la que reponer fuerzas después de una jornada maratoniana de compras.
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