Carice van Houten, de sacerdotisa en ‘Juego de Tronos’ a musa de la alta costura de Iris Van Herpen

El espectáculo debe continuar. Aunque sea a través de una pantalla. Hoy ha dado comienzo la semana de la Alta Costura de París, la segunda pasarela (la primera fue la de Londres, celebrada a mediados de junio) que se celebra casi íntegramente en formato digital. Ayer Balmain retransmitió en directo, fuera de calendario, un ‘desfile’ con sus modelos subidas en un barco por el Sena y guardando la distancia de seguridad que requieren estos tiempos. Esta mañana, Daniel Roseberry, director creativo de la histórica maison Schiaparelli ha compartido una filmación que ilustra el proceso creativo y la inspiración de su colecciónd e alta costura para el próximo otoño. Tras él, le tocaba el turno a Iris van Herpen, la creadora holandesa famosa por crear diseños en 3D más cercanos a la escultura en movimiento que al mero traje hecho a medida.

En lugar de un desfile al uso, van Herpen ha preferido crear una especie de cortometraje experimental, ‘Transmotion’, una especie de fusión entre la naturaleeza y la tecnología, los dos pilares creativos de la diseñadora.

Dirigido por Ryan McDaniels, colaborador habitual de van Herpen, el vídeo tiene una única protagonista, la actriz y antante, también holandesa, Carice van Houten, famosa por ser la sacerdotisa roja en ‘Juego de Tronos’. No es la primera vez que la diseñadora viste a las actrices de la serie, pero su relación con van Houten es especial. «Me gusta su forma de mezclar lo frágil con lo poderoso en su modo de interpretar. creo que ambas cosas son necesarias en los tiempos que corren», ha declarado la diseñadora.

Esa poderosa fragilidad subyace en ‘Transmotion’, donde van Houten lleva un solo vestido: un traje de una pieza con semejanzas a una mariposa que homenajea a Ercher (no se sabe dónde empieza y dónde termina) y que se expande de forma orgánica a medida que avanza el vídeo. Van Herpen ha definido la presentación como «una cápsula del presente», un presente en el que la naturaleza y su reconstrucción son (o deberían ser) la clave.