De madera, mimbre o rafia: el bolso de la primavera es de fibra vegetal

De bambú y con una estética que huele a verano perpetuo. Si el Puzzle de Loewe ostentase el título a bolso más fotogénico de la historia, los de CultGaia sin duda le seguirían muy de cerca. Al menos, de eso deja constancia Instagram. Esta firma con base en Los Ángeles ha sabido convertir uno de sus bolsos, el “Ark bag”, en todo un fenómeno que no deja de acaparar fotos en esta red social. Cuenta con el beneplácito de la actriz y empresaria Jessica Alba, y blogueras como Julie Sariñana (Sincerely Jules) y Sara Escudero (Collage Vintage) no dejan de compartir soleadas imágenes con él de la mano.

“Es como si llevases una pieza de arte”, dice Jasmin Larian, la diseñadora que está detrás de sus líneas modernas y atemporales. “Es único y también muy práctico, mucho más de lo que la gente cree. Su éxito reside en el producto y la experiencia social que te da. Es un iniciador de conversación. Donde lo quieras llevar, serás parado”, explica a S Moda. Aunque tienen bolsos de madera que ya han colgado el cartel de “agotado” como el modelo Lilleth (se puede comprar por adelantado en su web), la realidad es que les costó mucho que el producto despegase. De hecho, nadie lo compró hace 2 años cuando se lanzó allá por 2013: “Era una de esas cosas que a la gente le encantaba pero no acababa de entender si era un bolso”. Larian insiste en que el producto fue lo primero, pero “el boca a boca y las redes sociales acabaron por catapultarlo”.

De la cesta de ‘Jane Birkin’ a la de picnic

El éxito de los bolsos de CultGaia se suma al fenómeno Jane Birkin que lleva inundando Instagram desde el verano pasado. No son de madera, pero sí de mimbre, a la manera en que la modelo solía llevar su cesta a todas partes durante la década de los 70. Marcas como Blooming Dreamer o Wish me Luck han sacado versiones bautizadas como ‘Birkin’ que han contribuido al mito de mano de la estilista Martha Ward o it-girls como Lucy Williams o Adenorah.

Pero ya no es solo cuestión de pequeñas enseñas. Estas cestas han llegado a trascender al low-cost, y firmas como Zara cuentan con la suya propia. Sobre la pasarela, Dolce & Gabbana es la casa que apuesta por el mimbre, pero decantándose por modelos más pequeños y con diseños cuadrados, a lo cesta de picnic, como el ‘Midollino’ de Prada. Mark Cross es otro de los nombres de lujo que también ha sucumbido al mimbre en diferentes diseños que van del satchel al tote.

Rafia, el triunfador de la pasarela

Si hay un material que se ha visto más veces en los desfiles, es sin duda la rafia. J.W. Anderson, que de catapultar un bolso al éxito sabe un rato, introdujo en la colección de primavera de Loewe un nuevo modelo, el Hammock, con la rafia como uno de los elementos estrella, que también ha incorporado por cierto en el ‘Barcelona’.  Las formas más tradicionales pueden encontrarse en Rosie Assoulin, PPQ o Agnès B., con materiales más burdos como el yute o el esparto. Por su parte, Blumarine propone capazos y pequeños clutches de rafia entrelazada que también pueden colgarse al hombro.

Aunque todavía las temperaturas no acompañan demasiado para sacar este tipo de bolsos, ya hay tiendas de high street que se han adelantado. Mango y Zara han dejado entrever entre sus colecciones de ‘última semana’ modelos de yute bordados y decorados en las asas con pompones o con flecos.