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Qué pasa cuando prefieres al ex de tu amiga que a su nueva pareja

Analizamos una de las situaciones más complicadas de la amistad: el tortuoso camino para llenar el vacío que dejan las exparejas de amigos.

Steve Brady con su exmujer Miranda Hobbs en una escena de 'And just like that'.
Steve Brady con su exmujer Miranda Hobbs en una escena de 'And just like that'.Cortesía de HBO

Aunque hay grupos de amigos en los que las exparejas de algunos de los miembros pasan a formar parte de la pandilla, lo habitual es que en el momento en que una pareja se rompe, el +1 ajeno al círculo íntimo desaparezca de forma casi inmediata de la vida de los amigos, de sus agendas de contactos y de sus redes sociales. La huella digital es eterna, pero la huella de una exrelación en el círculo de amigos es tan efímera como en ocasiones, el amor. La caducidad de las relaciones queda clara en el instante en el que al celebrarse una boda, los novios les piden en ocasiones a sus amigos que solo traigan a la celebración a parejas asentadas, para evitar así que en el futuro, al revisar las fotos del gran día, no haya nombres que fueron fruto de relaciones esporádicas.

Las parejas de nuestros amigos pasan a forman parte de nuestras vidas durante el tiempo que el amor les dure, pero, ¿qué pasa cuando una amiga o amigo rehace su vida y no mantenemos una buena relación con la nueva pareja? Es más, ¿qué ocurre si preferimos a su ex a quien ha ocupado su lugar? “Cuando hablamos de la vida de los demás, es inevitable emitir un juicio basado en nuestros gustos, experiencias de vida, prioridades, necesidades, etc. No obstante, no tenemos que olvidarnos de que lo que para nosotros es necesario, bueno o mejor, no tiene por qué serlo para los demás. En el caso de que a ti te guste más su ex porque te caiga mejor o porque seáis más compatibles, quizá, esa necesidad que tienes de decírselo a tu amiga sea porque estás pasando un duelo de amistad con su ex y una parte de ti, aunque sea muy pequeña, esté triste o enfadada con la situación. Si esto te resuena, deberías trabajarlo individualmente, porque ¿para qué se lo vas a decir a tu amiga? ¿Qué crees que podrá hacer ella con esa información? ¿De qué manera le afectaría saber que a su amiga no le cae tan bien su novio actual, con quien ha decidido compartir su vida, como su ex? Tengamos cuidado, porque de la sinceridad, que une y repara, al sincericidio, que hiere y separa, hay sólo un paso”, advierte la psicóloga Alicia González, que en septiembre publica Amigos Mejores.

¿Hablar o no hablar? Esa es la cuestión

En el caso de que tu amigo o amiga esté percibiendo que no te cae del todo bien su nueva pareja y comience a no hablarte de su vida con su nuevo interés amoroso… ¿Qué podemos hacer para evitar que la amistad se deteriore? Responde Raquel López, autora de Guía de gestión emocional: “Ser sincera contigo misma y con ella. Si simplemente no te cae bien, pero no hay motivos reales para que así sea, tendrás que aceptar que es la relación de tu amiga, aguantarte y acompañarla, sin hacerla sentir juzgada ni mal por estar con esa persona. Si no te cae bien porque ves cosas que te preocupan, se lo puedes comentar de forma asertiva, enfrentando el tema directamente. Puedes decirle algo como “Hay cosas que no me gustan de esta persona y que me preocupan, pero no quiero que esto nos distancie: soy tu amiga y voy a estar aquí para apoyarte siempre, así que intentaré darte mi opinión con cuidado. Pero por favor, sigue haciéndome partícipe porque quiero estar aquí para ti”. También es importante que la amistad no gire sólo en torno a eso. Buscad tiempo de calidad, pasadlo bien, demuéstrale que estás ahí, pregúntale por otros temas…”, recomienda.

Pero, ¿realmente le tiene que importar a tu amigo o amiga lo que opines de su pareja? “Creo que aquí hay límites, es decir, hay aspectos tóxicos que hay que explicarlos para ayudar a esa amigo a que vea que hay actitudes de maltrato o negativas que no se deben permitir. Pero si se trata simplemente de que la nueva pareja nos gusta más o menos, es algo sobre lo que no nos toca opinar, pues debe ser nuestro amigo el que decida qué quiere como relación y con quién se quiere vincular, por lo que vuelve a ser información innecesaria. Tampoco hemos de olvidar que una cosa es verlo desde fuera y otra, desde dentro”, dice Núria Jorba, Directora del Centre Núria Jorba, psicóloga, sexóloga y terapeuta de parejas. Raquel López coincide en señalar que depende de si se trata de una mera opinión subjetiva o si hablamos de casos en los que nuestro amigo o amiga se está aislando o está siendo preso del control de su nueva pareja. “En esos casos, tu papel puede ser fundamental para ayudarle a darse cuenta de esas cosas que no son normales o sanas en una relación. Por tanto, para mí sí es importante que exista un buen apoyo social, que entre amigos os contéis cosas de vuestras relaciones y os deis vuestra opinión sincera”, añade Raquel López.

Contacto con el pasado y con el presente

En el caso de que no sólo prefiramos al ex de nuestra amiga, sino que sigamos manteniendo contacto… ¿Hay algún problema? ¿Es una traición? Alicia González señala dos conceptos a tener en cuenta: la libertad y las lealtades. “Para determinar si realmente es problemático que mantengas el contacto con su expareja, lo oportuno es que hables con tu amigo a amiga. En el momento en el que surge la duda, ya sea porque creas que a ti te molestaría, o porque a ti te de igual pero temes que a tu amiga le duela, invito a poner el tema encima de la mesa. La decisión final deberás tomarla tú teniendo en cuenta cómo te sientes y qué piensas, cómo se siente y piensa tu amiga y cuán importante es esto para ti y tus valores. Es posible que hayas congeniado mucho con su ex, pues quizá han sido años de amistad y casi se ha convertido en un amigo. Las amigas también pasan duelos. Como es completamente normal que sea un tema complicado, invito a hablarlo”, asegura la psicóloga.

Otra de las dudas habituales es si es conveniente quedar con la nueva pareja para intentar limar asperezas. Alicia González advierte que en el caso de que pensemos que está tratando mal a nuestra amiga, es casi imposible ese acercamiento. “Cuando tenemos pareja, tendemos a olvidar fácilmente las peleas, las decepciones y los desencuentros, pero como amiga, los almacenas y no los olvidas, ya que no has tenido esos momentos bonitos y reparadores que se tienen en una relación de pareja y que ayudan a olvidar. Tú recolectas en tu cabeza todas las veces que has visto a tu amiga llorar, los WhatsApps terribles que has leído, las noches que has tenido que ir a buscarla… En estos casos, creo solo de pensar en intentar construir una amistad, se te arruga el estómago”, explica. Señala que en casos de complementariedad de carácter y de personalidad, quizás nos lo podamos plantear al creer en lo mucho que le gustaría a nuestra amiga que así fuera. “Si es así y te apetece, podrías intentar conocerle un poquito más y ampliar la imagen negativa que tienes sobre esa persona. No obstante, puede ser que a tu amiga le dé igual que no seáis íntimos, y en ese caso, no pasaría nada. Cuando ha habido un conflicto, es muy importante dejar a la amiga/pareja fuera. Es muy complicado ser la pareja y sentir que estás en el medio de tu pareja y de tu amiga, pues presionarte con que debes escoger bando es terrible. Los adultos pueden y deben solucionar sus problemas, por lo que recomiendo no esperar que tu amiga te defienda ni tampoco pedírselo, sino tratar el tema en cuestión con la persona con la que has tenido el conflicto”, dice. Jorba dice que siempre es bueno no quedarnos con la primera impresión, porque quizás no es la definitiva. “Se trata de ofrecer varios intentos para ver si hay aspectos con los que encajamos y que pueda aparecer un cierto feeling. Si no es así, entonces lo mejor es mantener una distancia”, matiza.

Si finalmente hemos hecho todo lo posible para acercarnos a la nueva pareja de nuestros amigos y seguimos considerando que no hay conexión alguna, ¿podemos pedirle quedar con ella sin su compañía, o semejante petición es una bofetada a la amistad? Raquel López lo ve oportuno. “Vuestra amistad es una relación igual de válida que la que tiene con su pareja, y tiene que ser un lugar seguro para ambas. Evidentemente, no le hará ilusión, pero al igual que cuida su relación de pareja, también se debe cuidar la amistad, y eso pasa por tener tiempo de calidad juntas y compartir momentos. Es más, incluso si te cae genial su pareja, puedes pedirle tiempo a solas si lo necesitas: no tiene absolutamente nada de malo. Tu relación es con ella, y hasta que se vea cómo se coloca y cómo ubicas tu relación con su pareja, se tendrá que gestionar de forma acorde a las necesidades de todos”, asegura.

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