‘Fit Moms’: bienvenidos al mundo de las embarazadas adictas al gimnasio
Entre las fans y las detractoras, crece una comunidad en Instagram que alaba las barrigas pequeñas y los cuerpos fibrosos antes de dar a luz.
Ni blogueras, ni influencers ni instamodelos. Las nuevas estrellas de la red son las fit moms. Acumulan miles de seguidores, otros tantos likes en cada publicación y generan admiración y críticas a partes iguales. Las reconocerás porque practican exigentes entrenamientos durante los meses de embarazo y los comparten con el mundo en sus redes sociales hashtag de rigor mediante (#fitmom acumula más de ocho millones de publicaciones y subiendo). The Cut, la web femenina y feminista de el New York Magazine, las definía en un reciente artículo como “un nuevo tipo de celebrity de Instagram formado por futuras madres que hacen mucho ejercicio durante el embarazo. Existen muchas fit mom, embarazadas famosas en esta red social y los tabloides no dejan de hacerse eco de sus historias”. Cuerpos fibrosos y barrigas pequeñas son los requisitos indispensables para pertenecer a la comunidad.
Emily Breeze Ross (@emilybreeze) es una de estas embarazadas. Su nombre copó los titulares de numerosos medios estadounidenses hace un par de meses después de que publicase en su cuenta de Instagram un vídeo en el que levantaba una pesa de 45 kilos embarazada de ocho meses. Breeze es entrenadora personal, ha sido dos veces campeona de CrossFit y no dudó continuar con sus duros entrenamientos a dos semanas de dar a luz. Aunque muchos de sus seguidores le escribían comentarios de ánimo y admiración en sus publicaciones, la polémica no se hizo esperar. Varios comentarios la tachaban de “egoísta” por dar prioridad a su físico por encima de la salud de su bebé. “Teniendo en cuenta que la gente no tiene ni idea de mis capacidades atléticas considero que muchos de los comentarios que recibí fueron absolutamente locos y tontos”, explica Breeze a S Moda. “El ejercicio que hice durante mi embarazo fue escalado, modificado y perfectamente adecuado a mi nivel y capacidades físicas gracias a la supervisión de mi médico. Me sorprende que la gente me critique cuando ni son doctores ni me conocen”, añade la deportista.
Breeze, al igual que las otras fit moms que no dejan de engrosar el tamaño y visibilidad de la comunidad, considera que el ejercicio durante la gestación es positivo y necesario. “En mi caso hacer deporte fue fabuloso. Nunca experimenté fatiga, náuseas o un aumento de peso exagerado. Siempre tuve mucha energía y dormía bien por las noches. Lo volvería a hacer una y otra vez con cada embarazo”, se reafirma. A día de hoy, Breeze ya ha dado a luz –su bebé tiene menos de un mes de vida– y no ha querido esperar demasiado para recuperar sus rutinas deportivas. “Después del parto me tomé un tiempo de descanso pero ya he vuelto a mis entrenamientos. Me siento fuerte y animada. Ahora tengo que aprovechar cada segundo porque no hay tiempo que perder”, nos cuenta por correo electrónico. Solo hay que asomarse a su cuenta de Instagram, en la que acumula casi 40.000 seguidores, para comprobar que ha vuelto a la carga y ya presume de tripa tonificada.
Esa es otra cualidad básica e imprescindible para ser una fit mom en toda regla: recuperar rápido el tipo después de dar a luz y compartir el paso a paso en Internet. El caso de Sia Cooper, otra reconocida cofrade de esta nueva tribu internetera, se hizo viral hace unos días tras recuperar sus abdominales en tiempo récord después del parto. @diaryofafitmommyofficial, su alter ego en la red, explicó a la revista People que había estado practicando ejercicio hasta el mismo día en que su hija vino al mundo. “Un día me desperté y vi que volvía a tener six-pack solo una semana después del parto. No había hecho nada más que estar sentada en el sofá dando el pecho a mi bebé pero mi cuerpo volvió rápido a su forma gracias a que entrené duro los nueve meses anteriores”, explicó a la publicación. Las fotos que muestran el progreso físico de esta joven, que ya ha sido madre dos veces a los 27 años, generan unos 2.000 ‘me gustas’ de media y comentarios en todas direcciones.
Otra de estas ‘celebrities de la maternidad deportiva’ es Chontel Duncan. Con casi 600.000 seguidores en Instagram, su historia recorrió los principales tabloides nacionales e internacionales después de que publicara una foto junto a otra amiga también embarazada. La comparación del tamaño de la barriga de ambas no tardó en hacerse viral. El vientre de Duncan era llamativamente mucho más plano y aún era posible percibir en él sus abdominales a pesar de encontrarse en la recta final del embarazo. “Cada mujer se desarrolla de forma diferente y eso no significa que una de las dos esté haciendo algo mal. Ambas tenemos bebés sanos y ambas tenemos embarazos increíbles hasta la fecha, sintiéndonos genial y llenas de energía”, escribió la entrenadora personal, exmiss y líder del fitness en Instagram. Eso no la salvó de una oleada de críticas por practicar boxeo o correr en meses de gestación en los que los especialistas suelen aconsejar reposo. Para rematar, tras el nacimiento de su bebé fue criticada de nuevo por “sujetar de forma incorrecta la cabeza del pequeño”. No hay duda de que maternidad, deporte e Instagram van unidos a la polémica.
Porque ser una fit mom lleva implícito tener un ejército de trolls y sobrevivir para contarlo (en Instagram, claro). Bien lo sabe Maria Kang, una de las embarazadas pioneras del movimiento que fue duramente criticada cuando allá por 2012 colgó una foto en Facebook en la que lucía abdominales, posaba junto a sus tres hijos y preguntaba a sus seguidoras: “¿Cuál es tu excusa?”. A pesar de que muchas la acusaron de avergonzar el cuerpo de otras madres, la controversia la lanzó al estrellato. Escribió un libro titulado irónicamente The No More Excuses Diet y participó en el reality de la Fox American Grit. A día de hoy tiene una página web en la que comparte consejos y vende calendarios, camisetas y gorras con su ya famoso lema contra los pretextos. «También he creado No Excuse Mom, un grupo del que ya forman parte 300 mujeres en 25 países distintos y que fomenta el uso de los parques y los centros comunitarios para que madres e hijos puedan hacer deporte juntos», detalla Kang a S Moda. «Siendo madre de tres niños tuve que aprender a hacer ejercicio durante los paseos en el cochecito o sentadillas mientras los llevaba en el portabebés. En mi caso, me centré más en la alimentación sana que en el deporte durante mis embarazos pero, siempre y cuando el tamaño de la barriga no impida el movimiento y el bebé no corra peligro, es importante continuar la actividad física en esta etapa. Se evita ganar demasiado peso o tener diabetes gestacional», nos cuenta.
Podríamos seguir enumerando fit moms y sus respectivas polémicas eternamente. La modelo Sophie Guidolin (famosa por su pequeña tripa a pesar de estar embarazada de gemelos), la bloguera de estilo de vida Hannah Polites o la modelo con más dos millones de seguidores Sarah Stage (ambas conocidas por ser ‘embarazadas six-pack’) son solo algunos ejemplos más para introducir la larga lista. Y como ocurrió con las blogueras de moda o las gurús de la vida sana, todo apunta a que el fenómeno seguirá aumentando. Puede que las embarazadas deportistas no sean nada nuevo pero sí el modo de rentabilizarlo (al final los seguidores se traducen en visibilidad y negocio) a través de las redes sociales.
Las modelos siempre han estado en el candelero por declararse adictas al deporte durante esta etapa vital. Gisele Bündchen, por ejemplo, confesó que durante su primer embarazo hacía yoga tres veces por semana y que practicó kung-fu incluso dos semanas antes de dar a luz. La supermodelo mejor pagada del mundo posó para la edición estadounidense de Vogue un par de meses después del nacimiento de su segundo hijo totalmente recuperada. “Las hay que se quedan embarazadas y deciden convertirse en cubos de basura”, espetó la top sin cortarse un pelo. Los Ángeles de Victoria’s Secret también han revelado someterse a estrictas dietas, entrenamientos y tratamientos físicos para volver a la pasarela sin rastro visible de la maternidad. Pero claro, ellas cuentan con especialistas que cuidan su salud al milímetro. No intenten imitarlas en casa queriendo probar suerte a la ligera en el universo fit mom. Probablemente a ningún médico se le ocurriría recomendar el levantamiento de pesas a escasas semanas del parto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.