El Rey: “El multilateralismo es un activo que no debemos perder”

En una época en la que los Estados Unidos y el Reino Unido se repliegan sobre sí mismos y apuestan por soluciones particulares en un mundo global, el Rey ha insistido en la defensa del multilateralismo “un activo que no debemos perder”. Lo ha hecho en la Casa de América, en Madrid, donde ha cerrado el acto del 20º aniversario de la Fundación Euroamérica, una organización independiente que estimula la cooperación entre Europa y América desde el sector privado. El Rey ha ponderado la importancia de las relaciones trasatlánticas con Europa y ha destacado ese como “un ámbito esencial para España”. En su intervención, ha señalado que “ese gran espacio puede y debe representar una contribución cada vez más importante al desarrollo equilibrado y pacífico de las relaciones internacionales y a la capacidad de enfrentar los grandes desafíos de la agenda global”.

La necesidad de ese ámbito, ha defendido el Rey, no viene impulsada solo por “la especial conexión histórica, de lengua y cultura” o un “interés económico privativo de España y Portugal”, sino también en lo “que es bueno para Europa y bueno para América Latina”. Pero el Rey no ha querido referirse a este espacio en términos excluyentes y ha destacado a los Estados Unidos, que viven con Donald Trump un auge proteccionista, como “un socio capital para España, y un país amigo por muchas razones”. Una de ellas, ha subrayado, “la herencia y presencia hispana tan importante y valiosa que tiene en muchas partes de su territorio”.

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Previamente, el ministro de Exteriores en funciones, Josep Borrell, abundado en ese escenario nuevo escenario que abrió la llegada de Trump a la presidencia de los Estados Unidos y que ha dejado a Europa en la necesidad de ampliar sus vínculos con Iberoamérica. “El que fue el viejo protector de Europa, los Estados Unidos, ya no quiere serlo, y su socio se ha convertido en su rival”, ha descrito. Borrell ha subrayado que desde que España ingresó en la Unión Europea ha potenciado su capacidad de tender puentes hacia Iberoamérica.

El Rey ha destacado el trabajo de la Fundación Eurameríca desde su creación en 1999 y de su presidencia cesante, Benita Ferrero-Waldner, a la que ha definido como “una de las grandes europeístas”. También ha puesto de relieve “el gran acierto” de la fundación por elegir como sucesor a Ramón Jáuregui, “un magnífica y experimentado conocedor de las relaciones entre Europa y América”.

Antes de las intervenciones se ha celebrado un coloquio sobre los desafíos que afrontan las relaciones trasatlánticas, moderado por el exministro Carlos Solchaga, en el que han participado el expresidente español Felipe González, el asesor especial para Venezuela Enrique Iglesias, la secretaria general Iberoamericana Rebeca Grynspan y el vicepresidente de la fundación José Ignacio Salafranca. González ha explicado que cuando llegó al Gobierno en 1982, las relaciones de Europa con América del Sur pasaban por Washington, sin embargo, ahora, con Trump, a los Estados Unidos no le interesa esta relación, creando un desequilibrio. En la situación actual, ha incidido, mientras se debilita por el norte, el vector atlántico se desarrolla por el sur.

El presidente de la Fundación, Ramón Jáuregui, ha defendido la necesidad de que Europa e Iberoamérica fortalezcan los vínculos: “Necesitamos hacernos fuertes”, ha apuntado frente a peligros como “el unilateralismo” y el populismo emergentes. “Somos demasiado pequeños. Juntos tenemos que defender retos importantes como el cambio climático, una fiscalidad justa y la defensa de las libertades y la democracia”, ha manifestado.