‘¡Vamos! Ciudadanos’, el lema de Rivera para las generales
El candidato presenta en un acto en Madrid su cartel electoral, con un eslogan que recuerda al movimiento de Macron, En Marche!
Abriéndose paso entre banderas de España, Albert Rivera camina con gesto serio. Sobre la imagen, en letras blancas, el lema: ¡Vamos! Ciudadanos Así es el cartel del candidato de Ciudadanos para las próximas elecciones generales, que el partido ha presentado este domingo en un acto ante varios miles de simpatizantes —6.000, según la organización— en Las Rozas (Madrid). Se trata "de una llamada a la acción, a una España que se pone en marcha para cambiar este país a mejor. Un eslogan en positivo con un mensaje de fuerza directo a todos los ciudadanos", explican en la formación. La inspiración es clara en el nombre del movimiento del presidente francés, Emmanuel Macron, En Marche! (en español, en marcha), un espejo en el que se mira Rivera para tratar de emular su victoria en Francia y abrir paso a una "tercera España", en sus palabras, que no se siente representada por el PSOE o el PP.
El candidato ha utilizado incluso la expresión "en marcha" en su discurso en Madrid, en el acto más multitudinario de la precampaña de Ciudadanos. "Tengo muchas ganas de poner a España en marcha. No quiero hablar ni de los huesos de Franco, ni de los neandertales ni del aborto", ha proclamado Rivera en alusión a algunos de los debates que plantean el PSOE o el PP. El idilio del movimiento del presidente francés, Emmanuel Macron, con Ciudadanos se ha enfriado, no obstante, en los últimos meses a cuenta de la posibilidad de que Cs pacte de alguna forma con Vox, al que no ha puesto un cordón sanitario como sí hacen los macronistas en Francia con la extrema derecha.
Rivera apuesta por una tercera vía en la que marca distancias de los dos partidos, aunque al PP le ofrece un Gobierno de coalición. Este domingo ha tratado de diferenciarse de ambos con el modelo de familia. Ciudadanos "es el partido de las familias", ha defendido, porque apoya todos los modelos frente a socialistas y populares. "Hay partidos en nuestra derecha que no creen en todas las familias, solo en las que ellos creen. Y la izquierda también, que no cree en la gestación subrogada. Señor Sánchez, señor Casado, dejen de escoger cuál es la buena familia y la mala".
El líder de Ciudadanos propone varios pactos de Estado —por la Educación o para hacer frente a la despoblación— y medidas de regeneración democrática, como eliminar los aforamientos. También una tarjeta sanitaria única y que el español sea lengua vehicular en Cataluña. Pero el énfasis lo pone, sin duda, en el combate contra el independentismo catalán, el leit motiv del partido. "Si soy presidente no va a haber lazos amarillos, ni banderas separatistas, ni adoctrinamiento en las escuelas, ni se va a prohibir el español ni se va a insultar a los constitucionalistas. Os prometo que si soy presidente no va a haber un solo pueblo de Cataluña o de España donde no siga vigente la Constitución española", se ha comprometido entre aplausos.
Rivera sale a ganar en el espacio del centro derecha, y en cada acto remarca su apuesta por un Gobierno conjunto con el PP para distanciarse más del PSOE, ante las acusaciones de los populares de que volverá a pactar con Sánchez. "Si hay un solo escaño más para mandar a Sánchez a la oposición, que no os quede ninguna duda: vamos a gobernar España". Al líder del PP le pide que se comprometa también en ese Ejecutivo conjunto: "Le digo al señor Casado que sea más estadista y menos partidista. Que piense en España".
El candidato ha lucido equipo, con Inés Arrimadas y sus fichajes de la sociedad civil: Marcos de Quinto, exvicepresidente de Coca- Cola; Sara Giménez, abogada gitana, y Edmundo Bal, abogado del Estado cesado por el Gobierno socialista. Estos han repasado sus trayectorias antes de dar el salto a la política. Edmundo Bal, relevado porque quiso elevar a rebelión la acusación contra los dirigentes catalanes presos, ha defendido que hubo violencia en los sucesos de septiembre y octubre de 2017 en Cataluña.
"Lo estáis viendo en el juicio, lo están contando los agentes. Escupitajos, lesiones, patadas, técnicas de estrangulamiento, trampas, ¡y no hubo violencia, según el Gobierno de España!". "Este régimen quiere adhesiones inquebrantables", se ha quejado en referencia al Ejecutivo socialista. En un discurso muy duro contra el PSOE, Bal ha calificado de "calvario para los españoles" los diez meses de Gobierno de Sánchez. El ejecutivo Marcos de Quinto ha cargado, por su parte, contra el "feminismo excluyente" y el intento de la izquierda, en su opinión, de "implantar una tiranía de lo políticamente correcto", un discurso con resonancias en la apuesta de Vox de "hablar sin complejos". Aunque también ha criticado a la derecha porque, a su juicio, en libertades individuales "ha arrastrado los pies". La abogada gitana Sara Giménez ha defendido que Ciudadanos, con su incorporación, "abre las puertas a la diversidad".
El rojo y amarillo del fondo del cartel de campaña de Rivera apunta a un acento clarísimo en la identidad nacional española y en la oposición a los independentistas catalanes. Arrimadas, que se ha referido al procés como un "golpe de Estado", ha defendido que "la libertad en Cataluña llegará cuando Albert Rivera sea presidente de España", sin citar explícitamente el artículo 155 de la Constitución. La líder de la oposición catalana, que da el salto a la política nacional para hacer tándem con Rivera, ha sido igualmente dura con el presidente socialista: "Es una obligación moral de todos los que amamos a España sacar a Sánchez y a sus socios de La Moncloa".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.