Una constructora que recibió adjudicaciones pagó un viaje al candidato del PP al Congreso por Almería
La empresa Facto recibió 824.268 en 2005 en contratos municipales cinco meses después de costear la visita a Milán de tres concejales
La constructora Facto Almeriense pagó en mayo de 2005 los vuelos y la estancia en un hotel de Milán al actual presidente de la Diputación de Almería y candidato del PP al Congreso por esta provincia, Javier Aureliano García Molina, según la documentación a la que ha tenido acceso EL PAÍS. El dirigente popular era en 2005 concejal del equipo de gobierno de la ciudad andaluza y, cinco meses después del viaje, el Consistorio del que formaba parte adjudicó a Facto Almeriense dos obras por valor de 824.268 euros.
No fue la única adjudicación que obtuvo la constructora, que se benefició también en septiembre de 2006 de otro contrato municipal de cinco millones de euros para la reforma del pavimento de la ciudad.
El candidato popular al Congreso no viajó solo. Junto a él, visitaron la ciudad italiana a costa del constructor dos de los entonces ediles del PP de Almería, Pablo Venzal y Francisco José Amizián. Y también quien era en 2005 jefe del gabinete municipal, Manuel Guzmán.
La constructora desembolsó por sus vuelos y tres noches en el hotel Four Points, de la cadena Sheraton, 5.766 euros, según la factura. Un documento que incluye por error que el alojamiento fue en Melilla, donde no existe el citado establecimiento.
Salvo Amizián, que anunció en 2011 que abandonaba la política, todos los agasajados por Facto han progresado en el organigrama institucional. El candidato al Congreso García Molina preside la Diputación de Almería, ocupa la secretaría general provincial del partido. Y se sienta desde julio del pasado año en el Comité Ejecutivo Nacional del PP de Pablo Casado.
Venzal es diputado en el Parlamento andaluz. Y Guzmán es segundo teniente alcalde en el Ayuntamiento de Almería.
El responsable del organismo provincial confirma que visitó Milán "en 2004 o 2005" en el marco de los preparativos de los XV Juegos Mediterráneos, que se celebraron en Almería en junio de este último año con la participación de 4.000 atletas de 21 países. Asegura que "utilizó el procedimiento habitual de trabajo" de un concejal para contratar el viaje oficial. No concreta cómo fue. Y dice no acordarse de quienes le acompañaron en la visita de tres días a la ciudad italiana.
Otro de sus compañeros de viaje, Manuel Guzmán, indica en la primera conversación con este periódico "no acordarse" de la actividad. Y, tras comprometerse a revisar sus documentos y responder a las preguntas, no contesta a las reiteradas llamadas de este diario.
Venzal, por su parte, enmarca en "un error" que su nombre aparezca en la factura de Viajes El Corte Inglés abonada por Facto Almeriense. Y confirma que visitó Milán en mayo de 2005, cuando era concejal de Cultura, para reunirse con una empresa contratada por el Consistorio para organizar las cabalgatas de los Juegos del Mediterráneo. "No me acuerdo de con quién viajé", remarca el hoy parlamentario autonómico.
Este periódico ha intentado también sin éxito contactar con la compañía Facto Almeriense, una firma de 71 empleados que en 2017 registró unas ventas de 5,6 millones de euros. Tampoco ha podido recabar la versión del exconcejal de Servicios Urbanos y Obras Públicas Francisco José Amizián.
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La empresa, bajo sospecha
Facto se vio envuelta en el caso Mesón Gitano, que investiga supuestas irregularidades cometidas por tres técnicos del Ayuntamiento de Almería para conceder a esta firma una obra de más de cinco millones de euros. El diputado Venzal también firmó en abril de 2006, cuando era concejal, un contrato con la empresa para la reforma de una cocina y un cuarto de baño en su domicilio. La constructora, que ese año recibió cinco millones en adjudicaciones del Consistorio, le pasó un presupuesto de 6.058 euros, según la documentación. El parlamentario reconoce que suscribió el contrato con Facto Almeriense, pero indica que finalmente confió las obras a dos empresas distintas porque el presupuesto de la constructora Facto "era demasiado caro". "Se pagó a los proveedores en lugar de a la empresa", dice.
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