Tráfico ‘caza’ en una semana a una veintena de transportistas por consumo de drogas

Ir al mando de un vehículo pesado no disuade a los conductores de consumir drogas. A lo largo de una semana, 19 transportistas de camiones y autobuses han dado positivo por consumir diferentes sustancias, durante una campaña especial realizada por la Dirección General de Tráfico. Una cifra que dobla a la de las denuncias por consumo de alcohol. Además, 2.990 vehículos fueron sancionados y otros 24 inmovilizados por diferentes motivos, lo que supone un 27% de un total de 11.182.

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En los siete días que duró el dispositivo especial 16 conductores de camiones y 3 de autobuses fueron denunciados por consumo de drogas. Uno de ellos conducía un vehículo de 40 toneladas cuando fue interceptado por la Guardia Civil que, además del positivo en cocaína, detectó varias irregularidades de carácter administrativo, entre ellas exceso de tiempo al volante y la manipulación del tacógrafo digital.

Por su parte, casi la mitad de los transportistas que dieron positivo en alcohol —tres de ocho, todos en la Región de Murcia— cuadruplicaban la tasa permitida para estos casos y que se sitúa en los 0,15 miligramos por litro en aire espirado. Uno de ellos, además, había consumido cannabis y cocaína. 

Exceso de conducción

Las irregularidades administrativas fueron las más numerosas durante la campaña. Entre el 26 de febrero y el 4 de marzo, los agentes detectaron anomalías relacionadas con la documentación del vehículo o la de los conductores en 839 ocasiones.  

El exceso de horas de conducción y las deficiencias técnicas fueron otros de los motivos de sanción más frecuentes. En concreto, la Guardia Civil denunció a 550 y 535 transportistas respectivamente por estas razones. La legislación actual establece que el tiempo máximo de conducción diario no puede exceder las 9 horas, salvo dos veces a la semana que puede llegar a las 10. En el caso de la jornada semanal, no puede superar las 56 horas. Precisamente, las cuestiones ligadas al tacógrafo —el dispositivo que registra el tiempo de funcionamiento de estos vehículos— fueron objeto de denuncia en 365 ocasiones.

Este no es el único dispositivo de la DGT dirigido a transportistas que revela prácticas que ponen en riesgo la seguridad vial. El pasado mes de febrero, durante una campaña de control sobre los autobuses escolares, la Guardia Civil denunció a más de 1.416 vehículos de este tipo —de los que 1.024 no disponían de autorización— y cinco conductores dieron positivo por droga.