El PP aún confía en que el PSOE cambie de opinión: “Es un primer no”

El PP no da por perdido al PSOE, pese al rotundo rechazo de Pedro Sánchez a Mariano Rajoy tras la reunión que mantuvieron la mañana de este miércoles en La Moncloa. "No es el mejor de los comienzos, pero estamos al inicio del proceso, no al final. Ha sido un primer contacto. Un primer no", ha resumido el vicesecretario general de Organización del PP, Fernando Martínez Maíllo. 

Los populares creen que el proceso de negociación será "largo" y confían en que en algún punto del camino el PSOE acceda a pactar con ellos porque creen que sus alternativas —un acuerdo con Podemos y la celebración de un referéndum en Cataluña o la convocatoria de nuevas elecciones— son peores escenarios para los socialistas. En el primer caso porque consideran que de volver a las urnas, la formación de Iglesias mordería muchos más votos al PSOE; y en el segundo porque creen que el electorado no entendería que después de haberse opuesto siempre a la consulta ahora accedieran a ella y que lo hicieran, además, ante un previsible aumento de la presión por la escalada soberanista en Cataluña.

"Sánchez venía con el no por delante. Era lo esperado. Pero creemos que estamos ante un primer contacto y estamos dispuestos a seguir dialogando", ha dicho Maíllo, quien ha medido mucho sus críticas al líder de la oposición.

Rajoy, intocable

La reunión en La Moncloa ha sido tan corta que Rajoy no ha podido entrar en detalles, según el PP. Preguntado por qué ofrecería o hasta dónde estarían dispuestos a llegar para lograr un acuerdo, Maíllo no ha querido enseñar sus cartas. "Hay que ser discreto. Hace falta prudencia, paciencia. Acabamos de empezar", ha dicho. Sí aclaró que el nombre de Mariano Rajoy no estará sobre la mesa de negociaciones. “Eso es incuestionable para nosotros”.

El presidente del Gobierno se reunirá el próximo lunes con Albert Rivera y con Pablo Iglesias, aunque el PP ha admitido que "es más fácil" llegar a un acuerdo con Ciudadanos que con Podemos porque una de las líneas rojas del PP es el referéndum soberanista en Cataluña.

El PP no quiere ponerse aún en el escenario de unas nuevas elecciones —"sería la ultimísima opción"— e insiste en que, aunque al ser la lista más votada les corresponde a ellos la iniciativa para intentar formar un Gobierno estable, "la responsabilidad de garantizar la estabilidad de España es compartida".

Rajoy piensa reunirse "con todas las fuerzas políticas". "Somos conscientes de que al no existir mayoría absoluta el diálogo tiene que estar más reforzado", ha dicho Maíllo, que no obstante, ha insistido en que los resultados del pasado domingo muestran que "pese a las dificultades de estos cuatro años, los españoles votaron mayoritariamente al PP, no el cambio".