Las embajadas evalúan los planes de Podemos en política exterior

La dirección de Podemos recibió este lunes en la sede del partido en Madrid a unos 40 diplomáticos de embajadas europeas, americanas y asiáticas para explicar su programa en vísperas del 20-D. El equipo de Relaciones Internacionales, encabezado por Pablo Bustinduy, hizo hincapié en el discurso de regeneración. Los diplomáticos se interesaron por la política exterior de Podemos, su postura sobre Cataluña, la reforma de la Constitución y la forma de Estado.

El auge de Podemos despertó hace un año mucho interés en las embajadas, sobre todo de países europeos. La formación ya movió ficha entonces para tratar de rebajar la inquietud de varios Gobiernos en relación con la repercusión mediática de varias de las medidas propuestas inicialmente por el partido, especialmente en el ámbito económico. Sus principales dirigentes empezaron a darse a conocer, aprovecharon su presencia en el Parlamento Europeo para entablar relaciones, mientras que Bustinduy, entonces coordinador de la delegación de Podemos en Bruselas y ahora número siete al Congreso de los Diputados por Madrid, comenzó una ronda de contactos con las embajadas que ha mantenido periódicamente en el último año.

Así, con motivo de las elecciones generales, el partido invitó al personal diplomático acreditado en España a la presentación del programa de política exterior. Bustinduy explicó: “Los diplomáticos han expresado mucho interés en la situación de campaña, en nuestra remontada, en la fase que se abre ahora y en cuestiones de política internacional, desde terrorismo a las relaciones con América Latina”.

Cataluña y Constitución

Los representantes diplomáticos preguntaron mucho acerca de la postura del partido sobre el encaje de Cataluña en España, que la formación emergente quiere solucionar convocando un referéndum; la reforma de la Constitución, en la que Podemos propone consagrar el llamado “derecho a decidir”; los derechos sociales, un nuevo sistema electoral, la despolitización de la justicia y la prohibición de las puertas giratorias (salir de la política y ocupar puestos en la empresa privada relacionados con la gestión pública anterior); y la forma de Estado.

Pablo Iglesias cree que los españoles deberían poder elegir al jefe del Estado, pero no lo considera una cuestión prioritaria. Los diplomáticos no formularon preguntas sobre Venezuela y los vínculos mantenidos en el pasado por dirigentes de la formación con el Gobierno de Hugo Chávez. La postura de Podemos, según destaca Iglesias, es la de mantener “buenas relaciones con todos los países latinoamericanos”, puesto que se trata de “relaciones estratégicas”.

Podemos tiene previsto, tras las elecciones, convocar de nuevo a embajadores y diplomáticos para hacer balance y explicar su trabajo en la próxima legislatura.