_
_
_
_

Rajoy solo quiere debatir con Pedro Sánchez para obviar a Rivera

El candidato del PP esgrime que el duelo presidencial entre los líderes de los dos grandes partidos "es lo que se ha hecho siempre"

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, este lunes en París.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, este lunes en París.Sergio Barrenechea (EFE)

El PP ha construido todo un discurso para justificar la ausencia de Mariano Rajoy de todos los debates que no sean el cara a cara del 14 de diciembre con Pedro Sánchez, del que presume haber auspiciado su rol de líder de la oposición. Su comité de campaña sostiene que Rajoy es el único que gestiona su doble condición y agenda de candidato y presidente y que debe medirse solo con el principal aspirante a relevarle. El PP aprovecha así para obviar el auge de Ciudadanos.

Más información
El PP: Rajoy no asiste al debate porque su único rival es el PSOE
Triple empate de PP, PSOE y Ciudadanos a tres semanas del 20-D
Rajoy, desde París sobre los debates: “No puedo atender a todos”
Los currículos de los candidatos
El PP: Rajoy no asiste al debate porque su único rival es el PSOE
Rajoy, desde París sobre los debates: "No puedo atender a todos"
Rajoy prefiere una entrevista
El presidente raciona su papel en los medios de comunicación

En el PP ya no citan nunca a Podemos ni a su líder, Pablo Iglesias, ni el peligro de los pactos del PSOE con los “radicales, extremistas y antisistema”, que fue uno de sus guiones preferidos de las campañas municipales y autonómicas de mayo y la catalana de septiembre. Los dirigentes populares y su candidato se ciñen ahora, sobre todo, en alertar contra el riesgo de “dar marcha atrás hacia las recetas fracasadas del PSOE en el pasado” y en evitar los “experimentos de plató” que identifican, sin citarle, con Albert Rivera, el líder de Ciudadanos.

En el diseño de la campaña del PP, de su programa, de las provincias por las que debe pasar su caravana, de sus mensajes a recalcar y de las participaciones de Rajoy en todo tipo de formatos televisivos se tiene en mente todo el rato a Sánchez como el gran adversario presidencial a batir y luego el pujante perfil de un político joven, de 36 años, que ha trastocado todas sus previsiones y planes.

El jefe de campaña del PP, Jorge Moragas, dedicó este lunes casi dos horas a detallar sus estrategias, los mensajes audiovisuales y eslóganes encaminados a las nuevas redes sociales que el partido ha preparado para su líder. El plan corresponde a tres conceptos de agencia de publicidad: “Empatía, proximidad y conexión”. Moragas sostiene que todo se debe a que el PP y Rajoy quieren “explicarse, escuchar y dialogar”. Otra cosa es debatir, en cualquier formato, en todos los medios informativos y con cualquiera.

Rajoy solo quiere debatir con Sánchez. “Es el debate que siempre se ha hecho con el líder de la oposición”, razonó Moragas e insistió en esa idea el propio Rajoy en su entrevista con Pedro Piqueras a la misma hora en Tele 5. Debates presidenciales ha habido cinco desde que se estrenaron en 1993. No le sorprendió al jefe de campaña del PP que las preguntas girasen, sobre todo, sobre la silla vacía dejada por Rajoy en varios foros. El PP sabía lo que se jugaba y a lo que se exponía cuando decidió que solo se enfrentaría al líder del principal partido de la oposición, que es el debate que se considera “fundamental como alternativa real de Gobierno y no con otras fuerzas aún extraparlamentarias”.

El chicle ilimitado

Fue Moragas el que utilizó este lunes la expresión de que “el tiempo del presidente no es chicle ilimitado”. Rajoy remachó: "Yo llego donde llego, soy presidente y no estoy solo haciendo campaña pero comprendo que otras personas (en alusión a los demás candidatos) tengan todo el tiempo para debates".

El líder popular sostiene cuando le preguntan que le encanta debatir y que le gustaría poder explicarle lo que ha hecho estos cuatro años en La Moncloa en persona a cada uno de los 46 millones de españoles. Pero Moragas defiende que “física y metafísicamente es imposible” porque Rajoy cuenta con la doble condición de ser candidato y presidente, algo que ejercerá hasta el final de la campaña, que coincide con una cumbre en Bruselas.

Los responsables de la campaña de Rajoy improvisaron este lunes nuevos argumentos para intentar explicar la razón por qué su cabeza de cartel había eludido estar en el primer debate digital organizado por EL PAÍS anoche y había optado por ser entrevistado a la misma hora en Telecinco por Pedro Piqueras. Moragas negó que hubiese detrás de esa decisión un deseo de contraprogramar a ningún medio informativo. El jefe de campaña del PP afirmó que la oferta para la entrevista a Telecinco llegó marcada para ese día antes que la de EL PAÍS y que no le parecía apropiado cancelarla. Luego añadió que un presidente solo debe debatir en las democracias asentadas con el líder de la oposición, como si existiese esa regla.

Los populares son plenamente conscientes de que estas elecciones del 20-D son especiales, porque existen de entrada cuatro partidos con opciones de ganar, porque serán más mediáticas e interactivas que nunca, con muchos canales enfocados hacia la información política, y líderes más televisivos y el apogeo de las redes sociales. Rajoy ahí tiene más carencias que sus rivales. El aspirante del PP cuenta para empezar con 60 años, frente a los 36 de Rivera, los 37 de Iglesias y los 43 de Sánchez. Rajoy ha mantenido ya debates cara a cara y presidenciales contra los socialistas Alfredo Pérez Rubalcaba y José Luis Rodríguez Zapatero y muchos en el Parlamento, todos con las reglas muy marcadas y con límites. Pero no está acostumbrado ni le gustan los duelos más libres.

El PP ha previsto que Rajoy vaya a todas las televisiones y esté en todos los medios informativos, pero en programas y entrevistas donde se sienta más cómodo, aunque el sábado próximo se estrenará en La Sexta Noche en un encuentro directo con ciudadanos.

Miedo a Soraya

Mariano Rajoy solo hará un cara a cara con “el adversario de referencia”, que será el líder del PSOE, el 14 de diciembre, en la Academia de Televisión. Pero habrá más y el PP estará representado porque presume de equipo. En ese reparto destaca la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, en la que se ha delegado el debate a cuatro en Antena 3 y que fue la dirigente que el PP ofreció para sustituirle en EL PAÍS, que no aceptó. Jorge Moragas dio alas a las especulaciones al subrayar que esa cita será de “gran interés para saber quién es el nuevo líder de la oposición” y al intuir que sus adversarios le tienen “temor e inquietud” no sabe si “porque es mujer, preparada y joven”.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_