Ciudadanos y Podemos se enfrentan por la reforma de los sueldos públicos

Ciudadanos y Podemos chocan frontalmente en sus planes para estructurar los sueldos de los cargos públicos en el caso de que ganen las elecciones generales del 20-D. Albert Rivera propone una tabla salarial nacional que elevaría el salario del presidente de 78.000 euros anuales a entre 250.000 y 300.000. Pablo Iglesias, por su parte, mantiene la limitación de los emolumentos de los cargos públicos a tres veces el salario mínimo —1.950 euros en 14 pagas— y seguirá esa filosofía en su propuesta para los estipendios del presidente y los ministros. Las discrepancias entre las dos formaciones volvieron a quedar patentes en la madrugada del martes.

“Hay gente con la que quieres contar y no puede dar ese paso porque no le compensa económicamente”, dijo Rivera durante una entrevista en El Larguero de la cadena Ser. “En política hay que hacer un voto de honradez, no de pobreza”, añadió. “Encima viene el populismo y dice que hay que cobrar 1.800 euros para ser alcalde de Madrid o Barcelona. Muy bonito cuando luego coloca usted a los asesores, a su primo, a su cuñado”, siguió en referencia al proyecto de Podemos, que ha conquistado esas dos alcaldías con coaliciones de izquierdas. “Jugar a quién parece más pobre en la política es pasar de un extremo a otro. Hay que regularlo, como los sueldos de los funcionarios, y fijarlo”, añadió Rivera, que cobra 4.500 euros mensuales, de los que cede el 10% al partido.

Con su proyecto de tabla salarial, el candidato pretende evitar, entre otras cosas, las subidas unilaterales de sueldos de los alcaldes, que en algunos casos cobran más que el presidente del Gobierno.

Esta es la situación actual. Mariano Rajoy gana 78.000 euros anuales. Es el sueldo más bajo de la mayoría de sus homólogos de los países del entorno de España. Por ejemplo, Angela Merkel, canciller alemana, cobra 270.000 euros, aunque no disfruta de una residencia gratuita, como el presidente español. Lo mismo ocurre con los diputados nacionales. Los españoles tienen como sueldo base de más de 3.600 euros. Un diputado alemán supera los 9.000 mensuales. Según fuentes de la Ejecutiva de Ciudadanos, esa diferencia ha impedido que se incorporaran a las listas o equipos del partido profesionales de larga trayectoria en la empresa privada.

Podemos apuesta por el modelo opuesto. El partido fijó desde sus inicios en su código ético un principio de austeridad para todos sus cargos públicos. El partido, que insiste en que tiene aspiraciones de gobernar, no ha fijado oficialmente su propuesta de sueldo para un ministro o un presidente del Gobierno. Sería, en cualquier caso, más elevada que los tres salarios mínimos. Quizá esta tabla podría haber desanimado a algún hipotético fichaje de la formación para las generales procedente de distintos sectores profesionales.

Iglesias ha tenido desde julio de 2014, cuando tomó posesión de su escaño como eurodiputado, un salario bruto de 8.020 euros mensuales, sometido a un impuesto comunitario de 1.761 euros. El candidato de Podemos ha donado cada mes, desde entonces, entre 3.700 y 4.000 euros a distintas actividades como el programa La Tuerka y al partido, quedándose con un salario neto de 2.249 euros, ya que, según explican en Podemos, “todos los europarlamentarios de Podemos cobran tres salarios mínimos interprofesionales españoles distribuidos en 12 pagas en lugar de en 14”.