Podemos realiza una encuesta que rebaja el efecto Ciudadanos

Podemos ha difundido este lunes una encuesta realizada por el partido el pasado mes de septiembre que, además de contener el efecto Ciudadanos reflejado en los estudios posteriores al 27-S, dibuja un escenario mucho más igualado en la disputa por el segundo puesto. El Partido Popular sería, sin ningún tipo de matiz, el ganador de las elecciones con un 27%-29% de los votos estimados. La formación que lidera Pablo Iglesias se situaría en una situación de empate técnico con la de Albert Rivera y con el PSOE, ente el 19% y el 21% de los apoyos.

Este sondeo, basado en 1738 entrevistas telefónicas realizadas entre el 10 y el 24 de septiembre, es decir, antes de las elecciones catalanas, pretende desmontar precisamente la percepción que se instaló tras esos comicios. El buen resultado de Ciudadanos y la caída de Podemos el 27-S no son, insisten los dirigentes de la formación emergente, extrapolables a las generales. A partir de ahora, por tanto, deben construir un nuevo relato y adaptarlo a "un nuevo marco discursivo atravesado por las elecciones catalanas y la irresponsabilidad de la mayoría de sus protagonistas".

Los datos del estudio, según el análisis de Carolina Bescansa y su equipo, confirman la tendencia de fluctuación del voto entre Podemos y el PSOE. “Nos dicen que el electorado de Podemos proviene, fundamentalmente, de las bases desencantadas del PSOE, los abstencionistas críticos, los nuevos votantes y una parte del electorado de IU”. “Por su parte”, prosigue la responsable del programa y secretaria de Análisis Político y Social del partido, “el crecimiento de Ciudadanos se explica mayoritariamente en los 16-18 puntos porcentuales perdidos por el PP” desde las generales de 2011. “Sin embargo, la nueva derecha posee menos capacidad para sumar antiguos votantes del PSOE y resulta poco atractiva para los jóvenes que votarán en diciembre por primera vez”, señala el documento. Izquierda Unida alrededor de la mitad de sus votantes, situándose entre el 3% y el 4%.

Los estrategas de Podemos rechazaron con dureza este domingo los resultados de la encuesta de Metroscopia para EL PAÍS, que atribuye a esa fuerza un 14,1% de los votos, con una caída de 14 puntos desde enero. Según su lectura de las variables, “es indiscutible que el proceso de cambio político avanza, pero sería ingenuo creer que la llegada de los nuevos partidos deshace como azucarillos en el agua la estructura y las bases de los viejos partidos”. “En el último medio año, la pulsión reaccionaria protagonizada por el PP se ha visto reforzada por la construcción de la herramienta regeneracionista Ciudadanos. Aunque Podemos está situado inmediatamente detrás del PP, en posición de empate técnico con el PSOE y Ciudadanos, todavía no estamos en condiciones de poner en marcha un Gobierno propio en España”, reconoce el informe de análisis de la encuesta, que concluye con algunos apuntes sobre la estrategia del adversario.

"Hasta el mes de mayo", señala, "quisieron desacreditarnos por la vía de las falsas acusaciones, las mentiras, el desprestigio de la organización y de sus portavoces o la estigmatización. A la vista del fracaso de esa estrategia, han tomado un nuevo camino: el de situarnos en la esquina de las izquierdas, invisibilizar la potencia transformadora de nuestro proyecto y la ola de ilusión que le acompaña y extender entre propios y ajenos la idea de que el único cambio posible es el de las siglas del PP por las de Ciudadanos". "Los partidos del régimen", en su opinión, "están lanzando su propia profecía con la esperanza de que se cumpla". Pero el texto invita a los simpatizantes de Podemos a no caer en el desánimo por las encuestas. Y zanja: "Esta vez podemos ganar".