La exfederación de IU en Madrid acusa a la dirección federal: “Ha fracasado”
"Defiende ahora el mismo modelo por el que se desvinculó" de los dirigentes regionales, lamentan en un comunicado
La exfederación madrileña de Izquierda Unida (IU) ha acusado este domingo a la dirección federal de enarbolar ahora -tras la ruptura de las negociaciones con Podemos para ir juntos a las elecciones generales- el mismo modelo de defensa de las siglas de la formación "por el que se desvinculó de su federación" al expulsar a los dirigentes regionales por divergencias sustanciales en el proyecto político.
Según la interpretación que hace ahora este sector, agrupado en torno a la iniciativa Convergencia de la Izquierda, "IU-CM defendía entonces un modelo de unidad de la izquierda que mantuviera la identidad original de Izquierda Unida" y "apostaba por un modelo de convergencia política por medio de la coalición electoral sin perder ni las siglas, ni los rasgos de partido de izquierda transformadora". "Sin embargo", prosigue un comunicado difundido hoy, "la idea de unidad popular de IU federal, encabezada por los dirigentes Alberto Garzón, Adolfo Barrena o José Luis Centella, pasaba por la integración total y mediante la pérdida de los valores intrínsecos de Izquierda Unida".
Este sector de exdirigentes de IU considera que el proyecto de confluencia de la dirección federal "ha fracasado". "Desde Convergencia de la Izquierda entendemos que el proyecto de los dirigentes de IU federal ha fracasado y ponemos de manifiesto las gravísimas consecuencias políticas que dichas acciones han tenido sobre la militancia", señala. La vieja guardia de IU en Madrid va más allá al "denunciar el autoritarismo y exclusión en lo interno y la sumisión a otro proyecto político en lo externo".
"Todo este proceso que llevaron a cabo dichos dirigentes federales", consideran los antiguos dirigentes, entre los que se encuentran el exportavoz municipal de IU Ángel Pérez o el exsecretario de Organización de la federación Miguel Reneses, "llevaba consigo engaños a la militancia y la desviación de la atención a otros asuntos en vez de reconocer que Madrid defendía concurrir a las elecciones general con las siglas de IU".
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