La Fiscalía investiga la votación de Andoain por un posible “tamayazo”

El fiscal superior del País Vasco, Juan Calparoro, ha iniciado una investigación de oficio de lo ocurrido el pasado sábado en la votación para la elección de la alcaldesa de Andoain (Gipuzkoa), en la que uno de los cuatro ediles del PNV votó en blanco en lugar de apoyar a la candidata socialista, lo que permitió la reelección como regidora de Ane Carrere, de EH Bildu. Al no lograr la mayoría absouta comprometida con el pacto, logró el sillón EH Bildu, la lista más votada.

El fiscal ha abierto diligencias al entender que en este caso “podría haber una motivación ilícita en el electo e, incluso, haber obrado sin libertad y víctima de un ilícito penal”. Calparsoro hace referencia a otros “casos similares” en otras ciudades y comunidades autónomas, y cita expresamente el “tamayazo”, cuando dos socialistas dieron al PP el Gobierno de Madrid en 2003.

Las investigaciones de la Fiscalía vasca se centrarán en lo sucedido durante la constitución del consistorio de Andoain (17 concejales), donde EH Bildu fue la fuerza más votada en las elecciones y logró seis concejales. El PSE, con cinco representantes, necesitaba los cuatro votos del PNV para alcanzar así la mayoría absoluta (nueve votos) y aupar a la socialista Maider Lainez a la alcaldía. El representante de Irabazi (coalición de la que forma parte IU y Equo) se votó a sí mismo y el de Ganemos, lo hizo en blanco.

El PNV y el PSE habían suscrito un día antes, el viernes pasado, un pacto de “estabilidad institucional” por el que ambos partidos se comprometían a apoyarse entre sí y votar a la lista más votada entre ambas fuerzas, incluso cuando no habían ganado las elecciones municipales. Este era el caso de Andoain, donde los socialistas podían recuperar una alcaldía histórica.

Sin embargo, durante la votación para la elección del regidor de Andoain, uno de los cuatro munícipes peneuvista votó en blanco en lugar de escribir el nombre de Lainez, lo que dio automáticamente la alcaldía a Carrere.

El PNV atribuyó la desobediencia a un edil “independiente”, en este caso Gregorio Olasagasti. Este concejal aseguró por teléfono a este diario, pocos minutos después de la polémica votación, que él no había votado en blanco: “Yo no he sido”.

El escrito destaca la "circunstancia" de que "ninguno de los concejales reconoce públicamente haber cambiado el voto acordado por su grupo", con lo que se produjo "la elección de una alcaldesa distinta a la que hubiera correspondido de haberse votado según lo aprobado por los grupos municipales". De ahí que Calparsoro sostenga que por ello "procede iniciar una investigación para conocer lo que ha ocurrido y las circunstancias".

El fiscal asegura en su escrito que esta situación “ha producido una tergiversación de la voluntad de los grupos municipales y, a través suyo, de la de sus electores, con la circunstancia de que ninguno de los concejales reconoce públicamente haber cambiado el voto acordado".

El Ministerio Público sostiene que procede abrir una investigación de lo sucedido sin descartar ninguna hipótesis. “El voto de un electo en contra de los aprobados por su grupo y actuando de manera subrepticia puede obedecer a varias causas y motivos”, asegura Calparsoro, quien añade que “podría haber una motivación ilícita en el electo (prevaricación, cohecho) o incluso haber obrado sin libertad y víctima de un ilícito penal (chantaje, amenazas)".

Calparsoso procede a investigar lo ocurrido en Andoain y recuerda que en España se han dado otros casos semejantes en ciudades y comunidades autónomas donde "ha existido una corrupción muy extendida" y, al parecer, se dieron "motivaciones por corrupción económica, como por ejemplo 'el Tamayazo', escándalo que obligó a repetir las elecciones" en la Asamblea de Madrid.

El fiscal hace constar en su decreto de apertura de diligencias de investigación que Andoain es un municipio donde “se ha sufrido con especial intensidad el terrorismo [de ETA] y se ha vivido con especial crispación”. Y añade que “el chantaje y la amenaza han tenido especial incidencia en esa localidad. El dolor causado todavía subsiste”. La banda asesinó en esta localidad en 2000 al periodista José Luis López de Lacalle y tres años después acabó con la vida con el jefe de la Policía municipal Joseba Pagazaurtundua.

Calparsoro también considera “difícilmente justificable legal y éticamente que la elección de alcalde se realice mediante voto secreto de los concejales”, lo que a su juicio “favorece sin duda los casos de corrupción y engaño”.