Ciudadanos choca con los sindicatos en el Primero de Mayo

La dirección de Ciudadanos chocó ayer frontalmente con los sindicatos al no acudir a ninguna de las manifestaciones organizadas por el Primero de Mayo, como adelantó este diario, y criticar el “inmovilismo” de las centrales a través de un comunicado firmado por Matías Alonso, secretario general del partido. Comisiones Obreras reaccionó acusando a la formación de Albert Rivera de “desconocer la realidad”. UGT lamentó lo que describió como “una posición poco meditada, neoliberal en un caso y de Izquierda Anticapitalista en otro”.

“Queremos unos sindicatos libres de contaminación política, independientes y ajenos a los intereses partidistas y de las élites dominantes que pretenden imponer posicionamientos supuestamente hegemónicos al margen de la democracia y del interés general”, manifestó Alonso, el secretario general del partido de origen catalán, que reclamó “que no se utilice esta jornada reivindicativa para limitarse a aparentar que se defiende a los trabajadores cuando en demasiadas ocasiones se hace justo lo contrario”. Alonso también instó a los sindicatos a trabajar “en defensa de los intereses de los trabajadores sin claudicar ante intereses espúreos de las oligarquías dominantes”. Sus duras palabras pronto encontraron respuesta en las centrales sindicales.

“Da la impresión de que el problema es que ellos no controlan el movimiento sindical y de que querrían influir en él políticamente”, opinó Fernando Lezcano, secretario de comunicación de Comisiones Obreras. “Me sorprende que una formación que tiene posibilidades de participar en la gobernabilidad de las instituciones tenga una visión tan poco informada y sustentada en la realidad del movimiento sindical”, añadió. “A Podemos, como a Ciudadanos, le falta conocer de cerca la realidad de nuestro trabajo”, argumentó Lezcano sobre la ausencia de los dos partidos emergentes en el panorama político español en la manifestación. “Pagan ser formaciones recientes, jóvenes, con menor conocimiento y experiencia en el mundo del trabajo y sindical. En el caso de Podemos, según nos conozcamos, las posiciones cambiarán”, añadió sobre el partido de Pablo Iglesias, que no acudió a ningún acto oficial pero sí apoyó, micrófono en mano, a los trabajadores de la plataforma Telefónica en huelga.

“Nosotros no convocamos a partidos, que son libres de hacer lo que entiendan más conveniente para ellos. Nosotros convocamos a los trabajadores”, argumentó José Javier Cubillo, secretario de organización y comunicación de UGT. “Ciudadanos manifiesta una posición poco meditada, neoliberal en un caso —califican a los sindicatos de inmovilistas para la creación de empleo—, y en el otro caso de Izquierda Anticapitalista, porque dicen que los sindicatos están con las élites capitalistas”, subrayó. “Son mensajes muy confusos, e irreales, cuando el país necesita claridad”.

La formación de Albert Rivera ya había tenido roces anteriormente con los sindicatos. Ciudadanos propuso que las centrales y la patronal perdieran el monopolio de la formación de los parados, medida finalmente adoptada por el Gobierno de Mariano Rajoy. Los planteamientos del partido en política laboral —que incluyen un tipo de contrato único con indemnización por despido creciente en función de la antigüedad— fueron mal recibidos por los representantes de los trabajadores. Finalmente, su ausencia de todos los actos oficiales del Primero de Mayo, y sus duras críticas — “los sindicatos no siempre actúan con lealtad con el conjunto de los trabajadores”, afirmó Alonso— hicieron que las malas relaciones entre las dos partes estallaran en público.