El PSOE busca la complicidad de los sindicatos en el 1 de mayo

Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, estará este viernes en la manifestación del Primero de Mayo convocada por los sindicatos y a la que se adhiere firmemente. Desfilará en Valencia, donde se encuentra para acompañar al candidato socialista a la Comunidad Valenciana, Ximo Puig. Los principales dirigentes de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE estarán en alguna de las decenas de manifestaciones que se celebrarán en España en conmemoración del día del trabajo.

César Luena, número dos del PSOE, en La Rioja; Antonio Pradas, en Sevilla; Micaela Navarro, en Jaén; Patxi López, en Bilbao; y Mariluz Rodríguez, responsable de Empleo, y Rafael Simancas, portavoz parlamentario de esa área, en Madrid, cerca de los líderes de CC OO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, respectivamente. Estos conocieron de primera mano el proyecto presentado por Pedro Sánchez el pasado martes en el Senado con su alternativa al actual Estatuto de los Trabajadores. “Queremos recuperar el sentido original del Estatuto de los Trabajadores como carta de derechos, incorporando derechos básicos”, se lee en el Manifiesto elaborado por el PSOE para esta conmoración. Si para los sindicatos este año tiene que ser el de la denuncia de la situación laboral precaria— “Así no salimos de la crisis”, es el lema sindical de este año—, para el PSOE debe ser una nueva legislación, que ya anticipó Sánchez en su acto del Senado.

El compromiso es firme: si Pedro Sánchez gana las elecciones, adoptará como primera medida la derogación de la reforma laboral y la puesta en marcha de tres modalidades de contrato, además de fortalecer el papel de los sindicatos. El acercamiento a los mismos es un hecho, a pesar de que en los últimos años las relaciones no han sido malas. Ahora, no obstante, se ha acrecentado la sintonía entre las demandas sindicales y las del PSOE y, desde luego, los partidos de la izquierda.

Si Pedro Sánchez gana las elecciones, adoptará como primera medida la derogación de la reforma laboral

Así lo reconoce el secretario general de UGT, Cándido Méndez, que constata “una renovación de los postulados del PSOE hacia la realidad laboral de España”, señaló a este periódico. El dirigente sindical diferencia las relaciones “personales” de las políticas, en referencia a los últimos secretarios generales del PSOE. La relación de afecto entre José Luis Rodríguez Zapatero y Méndez se mantiene y se mantuvo incluso cuando este sindicato convocó una huelga general a la reforma laboral que hizo el gobernante socialista.

El trato ahora con Sánchez, sin llegar al grado de amistad que alcanzó con Zapatero, es muy cercano, señalan fuentes de UGT. El combate del PSOE contra “los falsos contratos temporales” que encubren tareas fijas y estructurales, es una demanda del PSOE que coincide con los sindicatos. “En un momento de empuje neoliberal el PSOE no se ha dejado llevar por esa corriente”. Con esta declaración Cándido Méndez se hace eco de los reproches de “viejo y añejo” que ha recibido el proyecto de Pedro Sánchez, sobre todo, por el evidente interés de fortalecer a los sindicatos y la recuperación de parte del poder perdido por la reforma laboral del PP. Más poder pero también nuevas reglas de financiación para las centrales sindicales y la patronal.