Rosa Díez, a la ‘caza’ del indeciso

Si usted contesta al teléfono en Málaga, puede que le esté llamando Rosa Díez. Las elecciones andaluzas viven esta semana su esprint final. UPyD, el partido del que Díez es portavoz, corre el riesgo de quedar de nuevo fuera del Parlamento autonómico, según las encuestas. Sin embargo, hay entre un 40 y un 50% de votantes que aún no han decidido por quién optarán el domingo, según diferentes sondeos. Fruto de la combinación de esos dos factores, la formación ha apostado por centrar todos sus esfuerzos en intentar convencer a quien aún no ha elegido partido. Es UPyD a la caza del indeciso.

La formación apuesta por llamar casa a casa, organizar cafés y mítines callejeros para convencer a los indecisos

"Tenemos a voluntarios llamando continuamente, y también lo hacen Rosa Díez [la portavoz] y Martín de la Herrán [el candidato a la Junta]", explica Francisco Jerez, el portavoz de campaña. "Hay muchos indecisos, y queremos darles a ellos el protagonismo hasta el final de la campaña", continúa este miembro de UPyD, cuyos representantes se han atrevido estos días a dar mítines improvisados en tranvías, o a limpiar con bayetas magenta el Congreso, simbolizando su lucha contra la corrupción, con el objetivo de dar a conocer su mensaje a los votantes. "Este miércoles", añade Jerez; "también hemos convocado un café con indecisos en Málaga, que es donde estamos centrando nuestros esfuerzos. La idea es tener contacto directo con la gente, para que nos digan lo que piensan y solucionen dudas". "Estamos innovando", subraya. "Buscamos que los ciudadanos se queden a gusto y romper prejuicios creados. Es darle el protagonismo a los ciudadanos".

"Estamos haciendo muchos kilómetros y muchas actuaciones que simbolizan nuestra lucha contra la corrupción", dice Martín de la Herrán. "Ahora haremos el trabajo de limpiar la corrupción desde dentro. Alguno de los ciudadanos nos dice que centramos demasiado el foco en la corrupción. Hay datos altos de indecisos y queremos exponerles nuestro trabajo, porque la gente quiere una voz como la nuestra en el Parlamento: independiente, coherente y fresca".

UPyD obtuvo 130.000 votos en 2012, pero se quedó sin escaño. Ahora centra todos sus esfuerzos en lograr uno por Málaga, y ni las encuestas, muy negativas para sus interesas, evitan que Martín de la Herrán diga que está convencido de que lograrán cuatro o cinco diputados. En Andalucía, como en el resto de España, UPyD marca distancia con Ciudadanos, el partido con el que mantuvo conversaciones para fusionarse ("Hay que ser útiles, no una marca de moda", dice el candidato); apuesta por limitar por ley el número de cargos de confianza; y con ese adelgazamiento de la administración y un plan anticorrupción espera liberar los fondos con los que impulsar la economía poniendo el acento en autónomos y pymes, según su programa. "Tenemos un plan agresivo porque hay que ahorrar para crear empleo y mantener los servicios públicos", argumenta Martín de la Herrán. "Lo contrario es una leyenda negra. Por ejemplo, siempre hemos votado contra la privatización del agua allí donde hemos tenido representación en Andalucía. Estamos a favor de la sanidad pública y para todos y de la educación para todos".

Para que todo eso ocurra, sin embargo, UPyD primero tiene que lograr entrar en el Parlamento. Por eso, antes de las elecciones del 22-M, sus voluntarios y sus cargos están a la caza del indeciso.