Podemos se reúne con Assange y le brinda su apoyo en Bruselas

Podemos ofreció sus “recursos políticos” a Julian Assange en una reunión mantenida el pasado sábado en la Embajada de Ecuador en Londres entre dos representantes de la formación de Pablo Iglesias y el fundador de Wikileaks. Íñigo Errejón, portavoz del partido, y la europarlamentaria Tania González le brindaron colaboración para denunciar su situación a través de los resortes de los que disponen en el Parlamento Europeo.

Assange, que lleva dos años viviendo en ese recinto diplomático, es reclamado por Suecia, cuyas autoridades judiciales quieren interrogarle para determinar si le acusan formalmente de varios delitos de abusos sexuales. El exhacker teme, además, que ese país le extradite finalmente a Estados Unidos, donde enfrentaría a la justicia por las filtraciones de su organización.

Podemos cree que esta circunstancia “atenta contra la libertad de información y las garantías jurídicas mínimas” y es “representativa del miedo que tienen Gobiernos acostumbrados a funcionar de espaldas a la gente a que sus prácticas puedan ser conocidas y divulgadas”. “Dentro de nuestras humildes capacidades, queríamos mostrarle nuestra solidaridad”, afirmó Errejón en conversación telefónica. La ayuda ofrecida puede concretarse ahora en la presentación de iniciativas y en la constitución de un grupo de trabajo en Bruselas y Estrasburgo, donde eurodiputados de distintos grupos se han interesado por la situación de Assange.

“Limbo jurídico”

El encuentro duró cerca de 20 minutos y se produjo durante la visita a Londres de los representantes de Podemos para participar en un acto con el director de cine Ken Loach. Assange, según el relato de Errejón, se mostró firme y lamentó ante la delegación de Podemos su situación actual, “un limbo jurídico en el que no tiene ni los derechos y garantías de estar formalmente acusado ni puede vivir como una persona libre”.

La formación de Iglesias, que obtuvo 1,2 millones de votos y cinco eurodiputados en las elecciones europeas del 25 de mayo, recuerda, además, que los cargos que pesan sobre Assange en EE UU, acusado de espionaje, “podrían acarrear la pena de muerte”. En 2012, el Gobierno sueco se comprometió a no extraditarle si existe el riesgo de pena capital.