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Legalitat e inconstitucionalidad

No es un error, no. La palabra legalidad en catalán es legalitat. El president Artur Mas ha explicado tras su reunión con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que el referéndum del 9 de noviembre que piensa convocar sobre el derecho a decidir (autodeterminación nacional, independencia, separación) "es legal" y que le hubiera gustado que fuese pactado a la británica, en alusión al referéndum sobre la independencia de Escocia previsto para el 18 de septiembre.

¿Qué quiere decir con que es legal?

¿Acaso que es constitucional?

No. Es evidente que tal como está planteado es inconstitucional.

Lo que está revelando es su plan en todo detalle.

Veamos.

 Mas tiene pensado llevar a la aprobación del Parlament la nueva ley catalana de consultas. Esa ley excederá, según la información disponible, el referéndum de autodeterminación del 9 de noviembre de 2014. Regulará más cosas.

 Acto seguido a la aprobación de la ley de consultas, Mas firmará el decreto de convocatoria del referéndum del 9 de noviembre.

Desde este punto de vista, la convocatoria es "legal". Hay una ley, y el decreto se basa en la ley.

La legalidad formal está consagrada.

Si como dice, hubiese preferido un pacto a la británica es porque Mas no se engaña sobre la inexistencia de encaje de esta referéndum formalmente legal (conforme a la nueva ley catalana de consultas) en la Constitución Española realmente existente.

  Esta hoja de ruta tiene su miga.

Como la aprobación de la nueva ley en el Parlament y la firma del decreto de convocatoria serán sucesivas, sin pérdida de tiempo, el Gobierno tiene que preparar sus movimientos en el tablero de ajedrez.

Sí, porque una vez aprobada la ley y publicada en el DOGC (Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya), el Gobierno la recurrirá ante el Tribunal Constitucional pidiendo su suspensión inmediata. Pero atención, el Gobierno no acude de la noche a la mañana al TC. Primero necesita enviar la nueva ley catalana para informe al Consejo de Estado.

Mientras tanto, la ley de consultas ya está vigente.

A todo esto, el decreto de convocatoria del referéndum seguramente ya estará listo. El Gobierno no puede recurrir ese decreto al Tribunal Constitucional. Porque quien resuelve sobre los actos administrativos de la Generalitat es el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). Por tanto, el recurso debería ser dirigido a dicho órgano.

El Gobierno puede presentar dos recursos. Uno ante el TC y otro ante el TSJC.

O, simplemente, puede matar dos pájaros de un tiro. ¿Cómo? Mediante la petición al Tribunal Constitucional para que se suspenda la nueva ley catalana de consultas y... todos los actos que son consecuencia de la misma. Es decir: el decreto de convocatoria del referéndum del 9 de noviembre de 2014. 

Todo esto forma parte del plan de Mas, su concepto de legalitat. O de qué hablamos cuando hablamos de la legalidad del referéndum.

Como el referéndum será anulado constitucionalmente (es decir, por decisión del Tribunal Constitucional), y como además del tema nacional/territorial los escándalos de Jordi Pujol & Familia y su investigación judicial agravarán la crisis de Convergencia i Unió, Mas está abocado a una remodelación gubernamental (con vistas a elecciones constituyentes en 2016), cuyo único desenlace teórico sería una coalición con Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), teórico porque dicho partido considera prioritario la capitalización del terremoto convergente en las elecciones municipales de mayo de 2015. Todo ello en el marco de la conmemoración de la comparecencia de Pujol ante el Parlament, los actos de conmemoración del 300 aniversario de 1714 y la Gran Diada del próximo 11 de Septiembre.

Se empieza a ver el surco del final de la escapada.

  

Comentarios

Sr- Ekaizer, siempre le he escuchado con atención en los medios, especialmente en el monarac1. Se cree muy inteligente. Comete un error básico, indigno de su historial. No se plantea un referendum de autodeterminación, sino una consulta no vinculante, amparada por el TC (leáse las sentencias). Le garantizo que la ley de consultas será absolutamente constitucional. Si el Consejo de Estado dictamina a favor impugnación cometerá prevaricación. Me apena que su conclusión sea "se empieza a ver el surco del final de la escapada". Vd. lo cree? Solucionado? Domesticados? Me ha decepcionado por un análisis tan superficial.
La identidades son mutables y se construyen en base a creencias, a pesar de la corrupcion de CiU y de otros partidos, muy amortizada incluso con el ultimo desastre "pujol family" . Las creencias de una mayoria muy amplia de Catalanes empiezan a estar muy enraizadas en la imposibilidad de encaje en España y en la nula voluntad de reformar nada. La fase que se cerrará en 9-n abundará en una creencias si se puede votar o en otras si se impide hacerlo.
Para la gente en general, vivamos ya sea dentro o fuera de Catalunya, las referencias que nos llegan de todo este encuentro de posturas.Y como consecuencia de la propuesta de la consulta, son las de manifestar bien a las claras con la propuesta soberanista, que la cultura y la política catalana no quiere estar sujeta a monopolios exteriores, también llamados nacionales que la encorseten.Justificando con una supuesta estandarización nacional, una unidad de criterios de un todos a una, que no coincide con la traducción en realidad.Donde el esfuerzo se rentabiliza según se aplique y se gestione, desde la aplicación de unos valores locales que se denostan o se ningunean. Que en los intercambios a nivel nacional, además de poner la cama, se sale trasquilado.Donde solo se beneficia a quienes se quedan quietos en el barco cantando loas.Sin tocar un remo.
Lo que en estos momentos está diciendo Rajoy es un acto de propaganda en vez de una comparecencia ante los españoles para explicar el curso del año. A mi me avergonzaría decir lo que este señor está diciendo de la situación del pais. Espero que los periodistas y la oposición ponga a este señor en su sitio. Espero tambien que hable de la corrupción y los sobresitos.
Dicen los catalanistas que el referéndum podría ser constitucional además de legal si el Gobierno de Rajoy quisiera.De ser cierta tal aseveración habría que preguntarse por qué Rajoy se niega y yo lo tengo claro: porque supondría la ruptura del PP por su extrema derecha y entonces la derecha española, que basa sus éxitos electorales en la amalgama, lo tendría más difícil.El PP me recuerda a la CEDA, amalgama de todas la erechas posibles
Hubo un día en que el independentismo de Cataluña estuvo sobre la mesa del Presidente de España. Hubo un día en que el President de la Generalitat de Catalunya claudicó, pese a sus fuertes ideales, contra un idealismo político que predominó durante mucho tiempo por encima de todo hasta conseguir un puesto de poder. Ese día, los ideales de un independentista más que reconocido, casado con una mujer cristiana, catalana, que abogaba por que su país, Cataluña, un día fuera independiente del estado Español.Muchos fuero los pactos a los que llegó el President con el Presidente. En 1993 fue con el Felipe González y en 1996 con José María Aznar. De lo que se dijeron, de lo que hablaron, de lo que se confesaron a puerta cerrada, palabras sueltas y muchos recuerdos confusos.El primer pacto fue entre Felipe González, Presidente de España, y Jordi Pujol, President de la Generalitat de Catalunya, en el cual el asunto de la independencia, la bandera que había ondeado al viento durante muchos años alrededor del entonces candidato Pujol, debía guardarse en un arcón bien profundo donde no molestara al estado. A cambio, desde España, harían la vista gorda en referencia a lo que rodeaba tanto al President como a su familia a nivel económico y político. Fue ese día, y no el 9N, cuando se enterró un deseo de mucho catalanes en una fosa tan profunda y olvidada como las del franquismo, el sueño de una nación. Y quien sostuvo la pala, quien levantó la tierra a conciencia para no conseguir esa soberanía tan anhelada, fue el dirigente de Cataluña, el hombre en el que muchos catalanes depositaron, no sólo su voto, sino sus esperanzas. Aquel hombre fue Jordi Pujol Soley.Si es incompresible que un partido de derechas, como CIU, tuviera alianzas con uno de izquierdas, PSOE, llegaron los pactos del 1996 con el Presidente José María Aznar, que sin lugar a dudas, fueron más "públicos", por así decirlo. Tras dos meses de negociaciones, tanto CIU, como Coalición Canaria, como el Partido Nacionalista Vasco, dieron su apoyo al presidente Aznar cuando este, entre otros acuerdos, acordó la supresión del servicio militar obligatorio.El Pacto del Majestic, denominado así directamente al negociado con CIU, es decir, con el President Jordi Pujol, contenía la mejora de la financiación autonómica y el traspaso de competencias (que ya se había empezado durante el período socialista y no dejaba de ser un guiño, a conciencia, para la autonomía libre de una comunidad autonómica).Ahora, que otras controversias rodean a la familia Pujol con varios casos de corrupción y fraude fiscal, no está de más reconocer que todo esto no es cosa de un ahora, ni de un momento concreto del presente. Desde hace años, tanto los partidos de izquierdas como los de derechas, con sus líderes al frente de ellos como Felipe González y José María Aznar, eran conocedores de los "asuntos" más que turbios de la familia y guardaron silencio. Uno sentenció sus ideales, por un puñado de billetes de quinientos euros (y de pesetas que no debemos olvidar que su etapa presidencial al frente de la Generalitat de Catalunya fue del 8 de mayo de 1980 a 20 de diciembre de 2003). Otros, por un respaldo político, por una legislatura sin sobresaltos, o por una tranquilidad que aún no consigo comprender, accedieron no sólo a callar sino a permitir que todo lo que ahora se llenan la boca de criticar al acercarse el 9N fuera un hecho. Si no ¿por qué acceder a la mejora de la financiación autonómica y al traspaso de competencias?¡No se puede confiar en nadie! No en cuanto a política. Da igual las vestiduras que lleven unos y otros. Da igual el papel de desempeñen. Dan igual hasta los ideales, hasta la moral, hasta lo que es correcto y lo que no. En cuestión de rascarse la espalda, de protegérselas, o de asegurarse un "robo" mucho más discreto de capital público pese a sus abultados y más que desmesurados sueldos, está claro que da igual si son de derecha, de izquierdas, o de centro. A la hora de codiciar, de anhelar y caer en uno de los peores pecados capitales, está claro que la posición poder unido al aforamiento, son una pieza clave para dar rienda suelta al personal que en vez de defender a un pueblo, como debería de ser por el hecho de vivir en una democracia, cosechan fortunas con el sudor y la sangre de aquellos que creen en la libertad, el honor y el poder del pueblo. La política no se hizo para crear hombres nobles. Es el lugar que destinaron para que los pobres hartos de pan, consiguieran fortunas robando a los pobres y formando parte de una clase privilegiada sin clase alguna. ¡Esa es la verdad! http://es.blastingnews.com/noticias/2014/07/pactos-entre-caballeros-00114830.html
seguramente lo harán "legal" y se iran de España.... lo que no es menos cierto es que los estados resultantes serán mucho menos ricos... y mucho más insolidarios con sus pobres http://elbuhonero.es/infieles-en-la-red.html

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