Europa como solución

Las últimas entradas masivas de inmigrantes por las fronteras de Ceuta y Melilla han trasladado el debate sobre la política de inmigración al Congreso. EL PAÍS ha pedido a los seis portavoces de Inmigración de los principales grupos parlamentarios su opinión sobre los aspectos principales del mismo.

 »1.— ¿Qué medidas concretas habría que tomar para afrontar la presión migratoria que sufren Ceuta y Melilla?

PP. Francisco Márquez de la Rubia. “Este fenómeno no tiene soluciones rápidas ni sencillas. En primer lugar, se debe conseguir la máxima implicación de las autoridades de la Unión Europea. Más medios, más tecnología y más recursos destinados a que el acceso a territorio europeo se produzca por las vías legales existentes. Mientras eso no se produce, el Gobierno de España deberá seguir aplicando las políticas ya en marcha e incrementar su intensidad, mediante el refuerzo de los medios destinados al control de los perímetros fronterizos, la cooperación con Marruecos y los acuerdos internacionales. Por último, hay que incrementar la lucha contra las mafias que trafican con los inmigrantes”.

PSOE. Antonio Trevín Lomban. “Es necesario aumentar los medios humanos y materiales para hacer las fronteras más seguras. Asimismo es necesario formar a las fuerzas de seguridad tanto en tecnología como en el procedimiento a seguir en el caso de detención de inmigrantes que accedan irregularmente al territorio español. Por otro lado, hay que reforzar la colaboración con Marruecos y con aquellos países de donde son originarios los inmigrantes. Finalmente, también se debe canalizar parte de los flujos migratorios por vías legales, establecidas a nivel europeo”.

IU. Ricardo Sixto. “El cambio debe ser profundo. Se deben crear medidas de cooperación con los países de origen de aquello inmigrantes, como por ejemplo, invertir económicamente para generar empleo y evitar que tengan que huir de su país. Hay que cambiar la dinámica del capitalismo. El flujo migratorio no se va a frenar con medidas disuasorias, el cambio debe ser radical. Además, la principal vía por la que entran a España sigue siendo los aeropuertos. Por lo tanto, una valla más alta, más policías, concertinas, sólo provocan tragedias. Nosotros somos la frontera del sur de Europa, por lo que debe existir una colaboración con la UE, pero no para cerrar fronteras”.

UPyD. Carlos Martínez Gorriarán. “Un protocolo de actuación para la Guardia Civil que sea específico, transparente y acorde con la Ley de Extranjería y las normas europeas. De ninguna manera se deben permitir las pelotas de goma, ni las devoluciones en caliente. Cuando entran por la frontera, hay que realizar un procedimiento de traslado, donde se identifiquen, se atiendan sanitariamente y se devuelvan a su país. La UE debe involucrarse. La Agencia Europea para la gestión de la cooperación operativa en las fronteras exteriores (Frontex) debe tener una delegación permanente en Ceuta y Melilla. El problema no es solo migratorio, sino también existen las mafias y estas se deben combatir a fondo”.

PNV. Emilio Olabarría Muñoz. “De dos maneras. La primera es más utópica: la atención de origen. Una política en colaboración con la UE para fomentar el desarrollo de los países de donde las personas huyen. Las multinacionales deben terminar con la expoliación de los países. La responsabilidad social de las empresas debe introducirse en el marco jurídico.

La segunda medida es en un plazo inmediato: la ordenación de los flujos inmigratorios acorde con la ley. Las devoluciones en caliente, el material antidisturbios y las concertinas son medidas insolidarias e ilegales según la Comisión Europea de Derecho Humanos. Claro que no se puede permitir una entrada masiva y descontrolada, pero los medios de contención no pueden causar daños físicos”.

CiU. Antoni Picó i Azanza. “Se debe impulsar una política europea inmigratoria. Es un fenómeno que nos involucra a todos. Falta un vínculo más fuerte entre inmigración y políticas de crecimiento económico a medio y largo plazo. A corto plazo las concertinas deben desaparecer. La solución no es fácil, pero la única respuesta no puede ser el control de fronteras. Deben acordarse políticas de cooperación no solo económicas, sino también humanas y sociales, como promover el papel de la mujer en la economía y la educación de los niños y las niñas”.

»2.— ¿Se debe cambiar la ley de extranjería?

PP. “Es un texto que puede ser mejorado para, con absoluto respeto a los derechos de las personas y a los tratados internacionales, poder servir como un mejor instrumento. Cuando la evolución de una situación desborda los planteamientos iniciales, las leyes deben ser revisadas”.

PSOE. “No es lo más urgente. Este es un Gobierno que cuando no tiene soluciones o no quiere invertir lo necesario para resolver un problema anuncia como único remedio una nueva ley. Antes de cambiar la Ley de Extranjería hay mucho que hacer”.

IU. “Si se modifica, debe ser para garantizar la seguridad de los inmigrantes y flexibilizar el derecho de asilo, no puede ser que en España sea tan difícil conseguirlo. Pero no reformaríamos la ley para permitir las devoluciones en caliente”.

UPyD. “No creo que sea necesario. Esto no es un problema del marco legal sino de gestión. Las devoluciones en caliente las reprobamos, sabemos que la vía alterna, es decir, recibir a los inmigrantes y dejarlos en un centro de atención hasta ser devueltos es más caro, pero ahí es donde debe cooperar la UE. Si repartiéramos el coste entre todos los países miembros, saldría barato”.

PNV. “Sí, pero en el sentido contrario al del PP. Se deben recuperar y respetar los principios de arraigo social, laboral y reagrupación familiar. Se deben regular los Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) que ahora parecen centros penitenciarios”.

CiU. “Ya se ha modificado la ley varias veces. Creo que hay que darle estabilidad a las normas. Veo difícil que el Gobierno pueda legalizar las devoluciones en caliente. Su único respaldo es el actual convenio con Marruecos, pero hay normas superiores como lo que dicta la Comisión Europea de Derechos Humanos”.

»3.— ¿El material antidisturbios que utilizó la Guardia Civil el pasado 6 de febrero, tuvo algo que ver con la muerte de los 15 subsaharianos?

PP. El ministro del Interior ha ofrecido con detalle el desarrollo de los acontecimientos. De esa comparecencia se deriva nuestra convicción de que los medios empleados no influyeron en el dramático resultado. En cualquier caso, la investigación judicial será la que determine cómo se produjeron los hechos. En cuanto a los materiales que deben ser empleados: las fuerzas y cuerpos de seguridad deben estar dotadas de todos aquellos medios necesarios para que puedan cumplir sus funciones, aplicando los principios de proporcionalidad y coherencia. Los protocolos de actuación determinarán a posteriori las formas y ocasiones en que deben y pueden ser usados”.

PSOE. “Para buscar responsables tenemos que saber todo lo que pasó y eso es lo que exigimos al Gobierno. Lo fundamental en este caso es quién y por qué se dieron esas órdenes y si el operativo de la madrugada del día 6 era el adecuado en número y preparación para hacer frente a los hechos”.

IU. “Eso deben decidirlo los tribunales. Pero, quien haya dado la orden debe ser juzgado y asumir la consecuencia de sus actos. La utilización de material antidisturbios debe ser condenado”.

UPyD. “Si las pelotas de goma pudieron causar la muerte de esas personas, no lo sabemos. Por ello hemos pedido que se abra una comisión de investigación, aunque el PP ya la ha rechazado. En todo caso la culpa no es de la Guardia Civil, estos se limitaron a recibir órdenes. La responsabilidad es política, es de aquellos que dieron las órdenes, es del Ministerio de Interior, y si no es su culpa, entonces que abra una investigación”.

PNV. “No puedo anticiparme, ya está en proceso judicial. Habrá que esperar, pero desaprobamos los materiales antidisturbios”.

CiU. “Juzgar el papel de la Guardia Civil corresponde a los jueces, pero exigimos explicaciones a los responsables políticos. No ponemos en duda el trabajo de la Guardia Civil”.