En prisión los detenidos por la desaparición del ingeniero vasco

Los detenidos por su presunta relación con la desaparición del ingeniero vasco Hodei Egíluz en Amberes el pasado 19 de octubre se encuentran bajo custodia policial y así seguirán durante los próximos 30 días, momento en que serán puestos en libertad salvo que un juez decida que continúen en prisión. Todos ellos han sido arrestados por estar en posesión de bienes robados. "Creemos que en la noche de su desaparición, vieron a Hodei o tomaron algunos de sus objetos robados", ha confirmado el portavoz de la fiscalía de Amberes, Paul Van Tigchelt, si bien ha reconocido que ninguno de los arrestados ha dicho qué ha ocurrido con el joven o dónde se encuentra.

Esta información ha sido facilitada por Van Tigchelt durante un encuentro con los periodistas que ha tenido este viernes prensa en el Palacio de Justicia de Amberes. Según el portavoz, todas las pistas que manejan los investigadores apuntan a que Egiluz no desapareció voluntariamente, sino que fue víctima de "un acto criminal". "La policía trabaja de manera intensiva para esclarecer el caso", ha asegurado, aunque no ha querido confirmar ni desmentir nuevos detalles para no entorpecer la investigación.

El portavoz no ha confirmado ni desmentido que los detenidos sean cinco, como afirman los medios de comunicación. De ellos, el primero en ser arrestado fue Mohamed Yasser, marroquí de 25 años con antecedentes penales, cuando intentaba sacar dinero de un cajero automático con la tarjeta bancaria de Egiluz. La segunda fue una camarera rumana de 45 años llamada Carmen T., que se entregó a la policía al descubrir que el móvil que acababa de comprar pertenecía al desaparecido. La hija de esta, de 16 años, y su novio Youssef, también marroquí, fueron arrestados por haber sido, presuntamente, lo intermediarios de la venta. El quinto detenido es otro varón de 21 años y nacionalidad marroquí llamado Mohamed, de quien la policía sospecha que pudo ser el autor material de un atraco al ingeniero vasco cuando se dirigía a su casa después de haber cenado con unos amigos la noche del viernes al sábado.

La búsqueda del cuerpo de Egiluz en el río Escalda a su paso por Amberes se ha suspendido temporalmente por razones meteorológicas, pero continuarán en los próximos días, cuando el tiempo mejore y la juez a cargo de la investigación decida reiniciar la operación. El pasado miércoles, dos embarcaciones de la policía y de protección civil peinaron las aguas de los muelles Bonaparte y Willem, donde los investigadores sitúan los últimos movimientos del ingeniero. "No solo hemos buscado en el río, también en toda la zona del puerto por si había alguna prueba conectada", ha señalado Van Tigchelt.

La fiscalía de Amberes está "en contacto permanente" con la familia del joven vasco —que se desplazó a esta ciudad flamenca en cuanto tuvieron noticia de su desaparición—, para informarles de la evolución del caso y "ofrecerles asistencia" ha añadido el portavoz de la fiscalía.

Hodei Egiluz, natural de Galdakao (Vizcaya), se encontraba en Amberes, una ciudad de 500.000 habitantes a 45 kilómetros de Bruselas, desde el pasado marzo porque había encontrado trabajo en la empresa de tecnologías de la información Createlli. Los amigos que le acompañaban la noche de su desaparición le perdieron de vista entre las dos y las tres de la mañana en los alrededores de la freiduría Number One, en el cruce de las calles Hoogstraat y Suikerrui. Se trata del centro histórico, una zona repleta de viviendas, comercios y locales de hostelería a unos dos kilómetros de la calle donde el chico compartía piso con otros compañeros.