La Plataforma Antidesahucios protesta ante Rajoy, Cospedal y la cúpula del PP

Se trata de una ocasión que la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) no podía desperdiciar. Nada menos que la plana mayor del Gobierno y del PP reunidos, todos juntos en el madrileño hotel Ritz. Esa concentración se debía a que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, daba una conferencia, presentada por Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, y nadie podía faltar. Los activistas de la PAH llegaron antes que los convocados para lucir sus carteles y sus protestas y avisos para que los diputados no tengan la intención de rebajar el contenido de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP), que el Congreso tomó en consideración por unanimidad pero cuyo desarrollo está por hacer.

"Ladrones", "La ILP no se negocia", "Sí, se puede" y "No nos representan" han sido algunos de los lemas coreados por las decenas de personas congregadas frente al hotel Ritz a una distancia convenientemente alejada de la puerta del hotel, según se encargaron de preservar los miembros del fuerte dispositivo policial apostado en la zona. Pero no pudieron evitar los abucheos al identificar al propio presidente Mariano Rajoy, a la conferenciante, a la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, o a la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes.

La intención de la PAH y de representantes de grupos madrileños relacionados con este movimiento antidesahucios, han tomado este acto como uno de los primeros de "señalamiento" a los diputados. Es más, han adoptado un término utilizado en Argentina como es escrache, como sinónimo de señalar. "¿A quién señalan?": a los diputados para que tengan en cuenta que les seguirán y les apuntarán allá donde estén para recordarles que deben votar a favor de la iniciativa popular.

Es verdad que los cargos públicos contra los que han protestado son todos del PP a sabiendas de que el partido que apoya al Gobierno va a flexibilizar sus posiciones iniciales sobre la Ley Hipotecaria y las condiciones para el desahucio, pero no tanto como los activistas quieren.

"Sí, se puede" es uno de los carteles verdes y con forma redonda, que los activistas lucieron junto a otros redondos y rojos, con el lema "Pero no quieren". Ambos simulan los botones del Congreso que los parlamentarios deben presionar, a favor o en contra, de la ILP. Los puntos básicos "innegociables", según la plataforma, son la dación en pago con carácter retroactivo, la paralización de todos los desahucios y la creación de una bolsa de viviendas de alquiler social. El Gobierno, no obstante, aguanta el tirón toda vez que está a la espera de que el próximo día 14 el Tribunal de Justicia Europeo dictamine sobre la actual legislación hipotecaria en España. Es previsible que reciba un varapalo, lo que será tenido en cuenta para la nueva legislación.