El director de Método 3 niega que ordenara o hiciera las escuchas

Francisco Marco, el director de la agencia de detectives Método 3, el epicentro de las escuchas a políticos catalanes, ha negado que ordenara o hiciera las escuchas en el restaurante La Camarga de Barcelona de la reunión entre Alicia Sánchez-Camacho, líder del PP catalán, y María Victoria Álvarez, exnovia de Jordi Pujol Ferrusola, hijo del presidente de Cataluña, al que acusó de haber participado en operaciones de evasión de capitales. La policía ha comenzado a registrar esta misma tarde la sede de Método 3 en Barcelona, tras mantenerla custodiada durante todo el día.

"Yo ni he ordenado ni he realizado personalmente esa grabación. Y si se hubiese realizado, que no se ha realizado, jamás se habría hecho sin el consentimiento de una de las partes", ha afirmado Marco en una entrevista al diario El Mundo, horas antes de ser detenido junto a tres detectives de la agencia, Elisenda Villena, Julián Peribáñez y Alex Borreguero, a quienes se acusa de revelación y descubrimiento de secretos (artículo 197 del Código Penal). La policía custodia desde ayer la agencia de detectives, cuya sede está en la avenida Diagonal de Barcelona. Los cuatro detenidos pasarán hoy a disposición judicial.

Borreguero declaró ayer ante la policía que Sánchez-Camacho estaba al tanto de que se iba a realizar la grabación y que incluso se barajó que ella misma llevara la grabadora. Fuentes del entorno de Elisenda Villena avalaron esta declaración, a la que la ni policía ni el PP le han dado crédito, al considerarla una maniobra exculpatoria.

Es la misma tesis que Marco defiende en la entrevista, en la que sostiene que ningún detective que siguiera a las dos mujeres hubiera podido colocar un micrófono en el restaurante. "Tengo plena seguridad de que, cuando una grabación se realiza en un momento determinado, en una mesa determinada, una de las partes tiene que informar de que esa grabación se va a realizar", asegura. "Si un detective les hubiera estado siguiendo, no habría tenido tiempo de poner un micro. O una de las dos personas advirtió de que se iba a producir esa comida o una de las personas la grabó".

La entrevista en El Mundo concluye así:

Pregunta. ¿Teme ser detenido como se rumorea?

Respuesta. No, porque jamás he vulnerado la ley.