El robo, principal hipótesis del asesinato de dos octogenarios en su casa de Murcia

El robo es la principal hipótesis que baraja la Guardia Civil en la investigación de la muerte de un matrimonio de 83 y 82 años en Santiago de la Ribera (Murcia). Según ha informado hoy el delegado del Gobierno en Murcia, Joaquín Bascuñana, "a primera vista da la impresión de que el motivo principal es el robo y a partir de ahí los autors se ven obligados a cometer el crimen", afirmó Bascuñana, quién señaló que la Guardia Civil de Murcia ha pedido la ayuda de una unidad especial de Madrid que llegará esta mañana al escenario del crimen. Los investigadores no descartan la posible participación de personas cercanas a los ancianos o que el móvil no haya sido el robo.

Los familiares de los ancianos tendrían ahora que denunciar la desaparición de los objetos que supuestamente habrían sido robados de la vivienda para que la investigación se centre en tal hipótesis, según la cual el crimen se habría cometido al ser sorprendido el ladrón o ladrones por el anciano, ya que la mujer se encontraba en la cama.

Al parecer, se habría empleado un arma blanca en los dos asesinatos, pero los agentes, según el delegado del gobierno, han observado una forma "un tanto extraña" de actuación por cuanto se trataba de personas de avanzada edad y de movilidad reducida contra los que no era necesario tal ensañamiento, y porque al salir no tuvieron ningún cuidado y dejaron entreabierta la puerta.

El anciano, conocido en el pueblo como Juanico el pintor, de 82 años, era una persona muy querida en la zona, por lo que este hecho ha causado conmoción en un barrio tranquilo de esta localidad. El suceso se conoció sobre las 19.00 de ayer, cuando una mujer que ayudaba al matrimonio y que llegaba a esa hora a la vivienda de la calle Maestro Gabriel Pardo Zapata, se encontró la casa revuelta y a la pareja asesinada.

El Ayuntamiento de San Javier ha decretado dos días de luto oficial hoy y mañana por la muerte en circunstancias violentas de José Antonio Ríos, de 83 años, y su mujer Josefina Medrín, de 82, en su vivienda, según fuentes municipales.

Las banderas ondearán a media asta y se suspenderán los actos oficiales durante los dos días en señal de luto por la muerte del matrimonio que era vecino de Santiago de la Ribera, "donde gozaban de la simpatía y aprecio general".