Los promotores de d3m y Askatasuna niegan que actuaran a las órdenes de ETA
El fiscal pide entre siete y nueve años de cárcel para los integrantes de D3M y Askatasuna Cuatro de los acusados reconocen su relación con las organizaciones ilegalizadas Aclaran que tuvieron dichas relaciones mientras fueron legales
Los 13 acusados de promover el partido heredero de Batasuna, Askatasuna, y la agrupación de electores Democracia Tres Millones (d3m), con las que la izquierda abertzale trató de concurrir a las elecciones vascas de 2009, han negado que actuaran a las órdenes de ETA durante la primera jornada del juicio que se sigue en la Audiencia Nacional. Solo cuatro de los acusados han reconocido sus relaciones con ambas organizaciones ilegalizadas por el Tribunal Constitucional, aunque subrayaron que su trabajo en ellas como promotores, trabajadores o candidatos solo se produjo antes de que fueran declaradas ilegales por el alto tribunal. El fiscal pide para ellos penas de entre siete y nueve años como miembros o colaboradores de organización terrorista.
El ministerio público considera a nueve de ellos miembros del aparato político-institucional de ETA al formar parte de formaciones herederas de la ilegalizada Batasuna. Otros cuatro, entre ellos dos de los promotores de Askatasuna, están acusados de colaborar con estas formaciones, consideradas por la acusación como parte de la estructura de ETA. A José Antonio Munduate (presidente de Askatasuna), y Xabier Isasa (secretario general) el fiscal les acusa de servir a la estrategia de ETA al crear Askatasuna. Ellos, sin embargo, lo han negado, aunque han reconocido que redactaron los estatutos de la formación y la inscribieron en el registro de partidos políticos del Ministerio del Interior.
Los otros dos acusados que confirmaron alguna relación con las candidaturas ilegalizadas, fueron Amparo Lasheras, que fue cabeza de lista de d3m en Álava y portavoz de la formación, confirmó formar parte de esa candidatura, aunque negó que lo hubiera hecho a las órdenes de ETA o Ekin. “Quise participar en las elecciones llevando una propuesta política vasca de independencia y mejora social, unas ideas totalmente legales (…). Me presenté para que esas ideas estuvieran en el Parlamento [vasco]”, ha declarado Lasheras, que, como el resto de acusados, solo han respondido a las preguntas de sus abogados, Jone Goirizelaia y Kepa Landa.
También ha reconocido su relación con d3m Agurtzane Solaberrieta, considerada la jefa de prensa de Batasuna tras la detención del miembro de su Mesa Nacional Juan José Petrikorena. Solaberrieta admitió haber trabajado como responsable de comunicación de d3m porque lo consideraba “un proyecto ilusionante” que respondía a sus “inquietudes políticas”. “Creí oportuno trabajar por las libertades democráticas de ese sector que no se podía presentar a las elecciones”, ha añadido. También ha afirmado que como responsable de comunicación de d3m, solo organizó dos conferencias de prensa para dar a conocer a los candidatos de la agrupación, pero a los 15 días fue detenida.
El resto de los acusados, la exconcejal bilbaína Arantxa Urkaregi, Elisabet Zubiaga, Iker Rodrigo Basterretxea, Imanol Nieto, Hodei Egaña, Unai Berrosteguieta, Zuriñe Zorrozua, Fernando Antia y Aitor Ligüerzana (el único en prisión, aunque por otra causa), han limitado su participación a la aportación de su firma ante notario para crear la agrupación de electores. En cuanto a la documentación relacionada con Batasuna hallada en los domicilios de algunos de ellos, han declarado que la tenían debido a que la necesitaban para ejercer sus profesiones o que databa de fechas en el que esa formación todavía era legal.
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