"La sentencia ha caído como una bomba allá, acá y en todo el mundo"

La prensa internacional sigue recogiendo reacciones a la condena ayer del juez Baltasar Garzón, inhabilitado durante 11 años por un delito de prevaricación relacionado con escuchas telefónicas en la investigación de la trama Gürtel. “El juez español inhabilitado recurrirá”, titula la cadena británica BBC, que añade: “[El juez] ha justificado las escuchas de las conversaciones entre sospechosos y sus abogados aduciendo que pensaba que los letrados estaban recibiendo instrucciones para lavar dinero”. El periódico británico The Guardian señala en su edición impresa: “El juez que persiguió a Pinochet, declarado culpable en el juicio de las escuchas en España”, y añade que sus “enemigos celebran la caída de un defensor de los derechos humanos”. El rotativo francés Le Monde informa en su edición impresa de que las víctimas del franquismo lideran la defensa del juez.

“Repudio desde Argentina por la sentencia judicial”, titula su información el diario argentino Clarín, que recoge el testimonio de un hijo de un fusilado por Franco, Darío Rivas, de 91 años. La sentencia ha caído “como una bomba allá, acá y en todo el mundo, por la importancia de lo hecho por el juez”, ha señalado Rivas, que ha llevado a cabo una batalla judicial para que su padre fuera buscado y enterrado. Por su parte, La Nación titula “Fuertes críticas al fallo en la Argentina”, país donde, como recuerda la noticia, “a fines de los 90, Garzón abrió un proceso en Madrid para investigar los crímenes de la dictadura argentina (1976-1983) apelando al concepto de justicia universal.

En España, la condena a Garzón ocupa un lugar destacado en las primeras páginas de los periódicos y es objeto de varios editoriales. Una dura condena, titula el editorial de La Vanguardia, que añade, sin embargo, que: “la unanimidad de los jueces que han dictado el fallo es tan llamativa que cuesta pensar que todos estén radicalmente equivocados”. El Periódico de Catalunya señala en El primer condenado que la inhabilitación del juez se añade a la intención del Ministerio de Justicia de restringir las escuchas a delitos con penas de cárcel superiores a dos años. “Es decir, las conversaciones de Camps [expresidente de la Generalitat valenciana juzgado por el caso de los trajes] con su ‘amiguito del alma’ serían ilegales. Sin comentarios”. ABC considera: Garzón paga sus excesos, y señala en el sumario que "[El juez] creyó que el fin justificaba los medios y rompió una regla sagrada del Estado de Derecho". Finalmente, El Mundo sostiene en el editorial Garzón actuó como si fuera juez de Pinochet que "el ya ex magistrado emuló con su comportamiento al de los jueces de la dictadura argentina o del mismo Pinochet al que persiguió".