Griñán zanja la polémica y ordena que Aguilar encabece la lista de Córdoba

Rosa Aguilar será cartel electoral en Córdoba. El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, también secretario general del PSOE andaluz, quiso ayer zanjar las conjeturas sobre la ubicación de la ministra de Medio Ambiente Rural y Marino —que el candidato a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, quiere en su equipo— y dijo en el desayuno inaugural del Fórum de Nueva Economía: “He hablado con el secretario general del PSOE de Córdoba [Juan Pablo Durán] y casi con toda seguridad encabezará la lista, vamos a dejar de hacer especulaciones”.

Esta era la idea inicial del PSOE andaluz, cuya secretaria general, Susana Díaz, dio la semana pasada un simbólico espaldarazo a la exalcaldesa de IU, a la vez que reprendió explícitamente a Carmen Calvo, exministra de Cultura y número uno en los comicios de 2008, quien anduvo varios días polemizando respecto a que jamás acompañaría a Rosa Aguilar por esta provincia.

El ruido que provocó la oposición frontal de Calvo y la difícil convivencia del PSOE cordobés con su otrora adversaria condujo a algunos dirigentes a sopesar un escenario menos reñido, como Almería. Pero, según Griñán, la decisión estaba prácticamente tomada entre el secretario general de Córdoba y él, ya que esta ciudad es la plaza natural de Aguilar (cualquier otro lugar chirriaría) y es donde tiene más tirón, aún contando con la supuesta antipatía del electorado socialista, y la ya no tan supuesta de Izquierda Unida, fuerza a la que dejó plantada, junto con la alcaldía, para marcharse a la Consejería de Obras Pública de la Junta.

La ejecutiva regional cree que la ministra debe concurrir por su provincia

Otras fuentes apuntan también que la operación de trasladar a Almería a Rosa Aguilar, que exploraban algunos dirigentes, se ha truncado antes de empezar, no tanto por el “espectáculo mediático” de las diatribas de Calvo como por las suspicacias que ha despertado esta patada de balón en la nueva realidad socialista de Almería, que estrenó en julio secretario general, José Luis Sánchez Teruel

En cualquier caso, el propio Juan Pablo Durán confirmó ayer a este periódico que la propuesta de la dirección para someter al refrendo de las bases es la de Rosa Aguilar. Lo que ocurre es que en el PSOE existen procesos reglados que deben ser respetados, al menos en las formas: reunión de asambleas locales, comités provinciales, comité de listas, etcétera.

El plantel andaluz a las generales está ya prácticamente cerrado

Griñán también despejó otra de las incógnitas: la de Micaela Navarro, consejera de Igualdad. Preguntado por si encabezará la candidatura de Jaén, el socialista se mostró sincero y taxativo a partes iguales: “Lo que diga Rubalcaba yo lo voy a hacer”. Luego, ante las risas de la concurrencia, se explicó: Rubalcaba es el candidato, asume la principal responsabilidad y todo el partido va detrás. “Si me pide a Micaela, la decisión es suya”, proclamó y adornó el acto público de entrega con un rosario de elogios a las virtudes de Navarro. No obstante, y aunque se da por hecho su nominación, la protagonista comentó ayer que por ahora ninguna instancia del partido había hablado con ella.

Aunque ayer no lo mencionó, en otras ocasiones Griñán ha comentado que decir sí es lo que hizo con Rosa Aguilar cuando, siendo consejera de Obras Públicas, José Luis Rodríguez Zapatero la reclamó para ministra, y, es de suponer, que una reflexión parecida le ha conducido a ordenar la inclusión de la exalcaldesa en la lista de Córdoba.

El plantel andaluz en las elecciones generales está prácticamente cerrado, pendiente del visto bueno de los órganos. Han sido ya confirmados verbalmente Alfonso Guerra (Sevilla), Manuel Chaves (Cádiz), Javier Barrero (Huelva), Rosa Aguilar (Córdoba) y Micaela Navarro (Jaén). Griñán se negó a comentar la posibilidad de que la ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, concurra por Málaga, si bien fuentes de la ejecutiva regional precisaron que, salvo contratiempos, lo hará. En Granada se perfila Cándida Martínez, miembro de la ejecutiva federal y candidata en las elecciones de 2008, y en Almería, Consuelo Rumí, secretaria de Estado de Administraciones Públicas.

Después de que Alfredo Pérez Rubalcaba presentara a José Antonio Griñán en el acto de Fórum Europa Tribuna Andalucía como un hombre tranquilo —que “dice lo que piensa y hace lo que dice”—, el socialista andaluz entró en otra de las controversias que se vienen arrastrando desde hace meses respecto a las elecciones generales y andaluzas. Reiteró que no va adelantar los comicios para hacer coincidir las dos citas porque no hay razones institucionales para hacerlo, y dijo más: “Alfredo nunca, jamás, me ha pedido que lo haga”.