_
_
_
_
_

El PP recurre el recuento de Barcelona en busca del noveno concejal

Los populares consideran que el escrutinio ha otorgado a CiU un edil que les corresponde a ellos

Àngels Piñol

El Partido Popular aseguraba antes de las elecciones que su objetivo era alcanzar los ocho concejales en Barcelona y no ocultaba que el noveno era poco menos que imposible. Las urnas confirmaron su pronóstico pero los populares no renuncian ya a lograr ese nuevo edil que acortaría su distancia con Convergència i Unió (CiU), vencedora de las municipales con 15. El PP ha presentado un recurso ante la Junta Electoral Central (JEC) al considerar que se le ha asignado a los nacionalistas un representante que les corresponde a ellos. La JEC tiene previsto dictaminar su resolución esta misma semana.

El concejal en disputa bailó entre los dos partidos el día de las elecciones pero al final se decantó del lado convergente por 113 votos. El recuento en la Junta Electoral de Zona ha reducido esa distancia a 60. Y el PP cree que puede seguir remontando hasta amarrar la plaza. Su tesis es que la junta ha anulado unos votos porque en ellos aparecían unas equis o señales junto al nombre de Alberto Fermández Díaz, el cabeza de lista popular. "Algunas papeletas aparecían  con la cruz igual que se hace con las del Senado", sostienen fuentes del partido.

La esperanza del PP reside en que el día de las elecciones se repartieron instrucciones para hacer el recuento que indicaban que deberían contabilizarse los votos con una señal. "Somos prudentes pero esas papeletas deberían ser buenas", ha afirmado la edil Àngels Esteller a Europa Press. Con la operación, el PP pretende reforzar aún más su papel en el Ayuntamiento de Barcelona que se prevé determinante ante la frágil mayoría obtenida por CiU, que se ha quedado lejos de los 21 regidores de la mayoría absoluta. Los socialistas, que no tienen la menor intención de promover la sociovergencia, lograron 11; los ecosocialistas, cinco y los republicanos, dos. CiU quiere gobernar en solitario y alcanzar pactos puntuales con algunas formaciones. Pero el PP cree, sin embargo, que esa estrategia solo funcionará de forma aislada y que los nacionalistas no tendrán más remedio que sellar alianzas más duraderas con ellos para favorecer la gobernabilidad.

 

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_